La Zona de Bajas Emisiones de Cuenca se aplicará a diario tras la negativa del Ministerio a vincularla a la contaminación

Cuenca

El Pleno del Ayuntamiento de Cuenca ha aprobado definitivamente la ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones con importantes cambios tras incluir catorce alegaciones. La principal es del Ministerio de Transportes, que ha eliminado que su aplicación esté vinculada al nivel de contaminación. Por tanto, estará activa todos los días. Además, también se ha dado el visto bueno a iniciar el estudio para implantar otra zona en el Casco Antiguo a petición de los vecinos.

La ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones entrará en funcionamiento el 1 de enero, pero las multas no empezarán a llegar hasta el 1 de julio. De controlar su funcionamiento se encargará la empresa concesionaria de la Zona ORA, que para ello utilizará nueve cámaras.

El concejal de Movilidad, Héctor Serrano, ha enfatizado que contempla multitud de excepciones y que se aplicará progresivamente. También ha recordado que su aprobación era obligatoria para no perder subvenciones, lo que causaría mucho daño a la movilidad. Eso sí, cree que se tiene que ver como una oportunidad y no como una obligación.

Los grupos del Partido Popular y de Cuenca en Marcha se han abstenido en la votación, según han dicho por una cuestión de responsabilidad, y han permitido la aprobación del texto. Los populares, eso sí, anuncian que posiblemente judicializarán la ordenanza porque no hay un Plan de Movilidad Urbano Sostenible actualizado. Desde Cuenca en Marcha se han mostrado críticos porque consideran que las restricciones basadas en etiquetas ambientales generan desigualdades.

Vox ha votado en contra de la ordenanza y el portavoz Rafael Rodríguez ha señalado que ha supuesto una línea roja y que a partir de ahora votarán en contra de todo lo que presenten desde el resto de grupos.