Hasta el abismo más profundo y más allá

Burgos

El grupo espeleológico Edelweiss ha descifrado casi todos los secretos de la cueva más profunda de la provincia de Burgos, la Torca de los Morteros, con más de 12.000 metros topografiados, 453 metros de desnivel total y un pozo de 250 metros de vertical absoluta.

Una cavidad situada en los valles pasiegos burgaleses, cerca de Espinosa de los Monteros, en la que Edelweiss lleva trabajando desde 1979, cuya singularidad ha merecido un número monográfico de su revista Cubía, la número 26 de sus 38 publicaciones científico divulgativas.

A pesar de ser una de las principales redes subterráneas de los Montes de Valnera y el Somo, ha sido relativamente poco conocida, si se la compara con las cuevas gigantes de los valles cántabros colindantes.

Una deuda, según uno de los autores de la publicación, Carlos Puch, que queda compensada con este monográfico que ofrece abundante información y documentación gráfica, en buena parte inédita.

Carlos Puch ha dedicado buena parte de su quehacer científico a la exploración, topografía, fotografía y muestreo geológico y biológico a esta emblemática cavidad, que contiene en su parte más profunda una sala gigantesca de 250 por 150 metros de anchura, además de ese abismo de 253 metros, que llaman el 'Pozo Amable'.

Junto a Puch, otra veterana de Edelweiss, la bióloga Ana Isabel Camacho, que ha destacado la biodiversidad de la Torca de los Morteros, donde ella misma consiguió descubrir una nueva especie de pequeño crustáceo.

Al carácter enigmático de su posición elevada por encima de los valles cercanos, la Torca añade incógnitas aun sin resolver, como el destino de las aguas que desaparecen en sus zonas más profundas.

Edelweiss, el grupo de espeleología más antiguo de Castilla y León, fundado en 1951, cuenta con la colaboración de la Diputación provincial y en este número especial con el Ayuntamiento de Espinosa de los Monteros, que ha apostado por la espeleología como recurso turístico.