El Consejo de Cuentas afea a la Diputación de Ávila que tenga externalizada la recaudación de impuestos

Una empresa privada realiza "casi todas las funciones" del Organismo Autónomo de Recaudación

Sede de la Diputación Provincial de Ávila / Eduardo Mayorga

Ávila

El presidente del Consejo de Cuentas de Castilla y León, Mario Amilivia, ha reclamado este lunes que la Diputación de Ávila reconduzca su gestión de la recaudación de impuestos, ya que pese a contar con un organismo autónomo para este fin, externaliza a la empresa privada "casi todas las funciones".

Durante su comparecencia ante la Comisión de Economía y Hacienda de las Cortes de Castilla y León para presentar informes sobre la gestión de tributos de las nueve diputaciones en 2019, Amilivia ha subrayado que la institución que dirige ha demandado a la Diputación abulense que vuelva a la "gestión directa", ya que no ven adecuado que sea privatizado este servicio.

En un sentido similar, pero en este caso referida a la Diputación de Burgos, el presidente del Consejo de Cuentas ha alertado de que no es adecuado que sean cinco entidades financieras las que se conviertan en colaboradoras de la institución pública y que cobren por ello, ya que se trata de una gestión que debe asumir como propia la Diputación.

En el turno de réplica a los grupos, que han coincidido en reseñar ambos casos como preocupantes, Amilivia ha alertado de que ambos casos podrían derivar en un problema de "nulidad de pleno derecho" de los cobros realizados por las Diputaciones, al poder ser consideradas las entidades financieras (Burgos) o la empresa que asuma esa función (Ávila) como órganos "incompetentes".

Amilivia ha defendido este serial de informes sobre los tributos gestionados por las diputaciones porque “los ingresos públicos constituyen una contribución coactiva del patrimonio de los ciudadanos por lo que su control resulta básico como medio de garantizar el sostenimiento de los gastos públicos”.

En cuanto a los aspectos organizativos, tres diputaciones (Ávila, Salamanca y Valladolid) tienen un organismo específico de recaudación, mientras que el resto prestan el servicio integrado en la organización provincial. Las diputaciones con más personal asignado a la prestación del servicio de gestión tributaria y recaudación son las de León y Salamanca y, con menos, las de Ávila, Soria y Palencia.

Estos informes desvelan que un porcentaje superior al 95% de los municipios de cada provincia delega a las diputaciones las facultades de gestión tributaria y recaudatoria, tanto en la voluntaria como la ejecutiva.

El Consejo ha observado que los ciudadanos suelen responder con un mayoritario pago de los impuestos en la fase voluntaria, ya que alcanzan el 90 por ciento de las cantidades puestas a cobro, con una suma total de 476 millones recaudados inicialmente y que se desglosan del siguiente modo: León (103,3 millones), Salamanca (73,2), Burgos (63,5), Valladolid (54,1), Ávila (48,5), Segovia (46,6), Zamora (34), Palencia (30,1) y Soria (22,3).

Por contra, cuando el contribuyente no paga, en la fase ejecutiva el grado de recaudación es "muy bajo en todas las diputaciones y tributos", según el informe, porque apenas alcanza el 30% sobre la suma total de las 9 instituciones, siendo también "muy bajo" el número de actuaciones de apremio y embargo, así como el alto grado de créditos que se declaran "incobrables". En total, el Consejo de Cuentas emitió 96 recomendaciones dirigidas a las 9 diputaciones y salvo algunas de carácter singular, en la mayoría de los casos contemplan aspectos bastante comunes orientadas a mejorar los procedimientos y corregir las principales deficiencias detectadas.

Entre otras, recomienda que el Pleno de las de Ávila, Burgos, Palencia y Segovia aprueben una ordenanza general específicamente reguladora de la gestión, liquidación, recaudación e inspección de los tributos locales delegados. A todas, excepto Salamanca, recomienda que el órgano de recaudación incremente las actuaciones y procedimientos de verificación y comprobación tributarias.

En las de Ávila, León y Segovia debería mejorarse el grado de recaudación en periodo voluntario de los impuestos ya que, con carácter general, se sitúa algo por debajo de la media.

También, el Consejo recomienda que en todas las diputaciones el órgano de recaudación debería mejorar la eficacia de sus actuaciones de apremio y embargo para el cobro de deudas en ejecutiva, y que en el caso de Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca y Valladolid estas deberían incrementar la eficacia de la gestión recaudatoria promoviendo el aumento de ingresos mediante la repercusión de las costas del procedimiento de apremio a los obligados tributarios.

Finalmente, Amilivia ha subrayado que las diputaciones de Burgos, Palencia, Salamanca, Segovia, Soria y Zamora, conforme a una adecuada metodología de costes, deberían "vigilar el binomio coste/rendimiento del servicio de gestión tributaria y recaudación, a los efectos de controlar que la tasa establecida, apoyada en un estudio económico, no rebasa dicho coste".