Los escaparates se apagan y los comerciantes se encienden

Valladolid

El Real Decreto aprobado el 1 de agosto que busca ahorrar el 7% de la energía para el invierno, como solicita Europa, recoge entre otras medidas las temperaturas en comercios, que dependiendo de su actividad deberá ser de 25 o 27 grados en verano,19 en invierno, y el apagado de las luces de los escaparates a partir de las 10 de la noche. Tras su entrada en vigor esta noche era la primera que hemos pasado sin la luz de los comercios y los afectados se muestran divididos.

Temperatura en los comercios

La imposición de la temperatura dentro de los comercios ha sido el aspecto en el que mayores diferencias han manifestado. Muchos comercios aclaraban que debido al incremento de la factura de la luz hacía tiempo que se ajustaban a esas temperaturas en sus locales o incluso habían prescindido de sistemas que regulen la temperatura. Muchos otros, debido a la disposición de sus comercios nunca lo han necesitado, pero los que si mantenían las temperaturas por debajo de lo establecido están divididos.

Declaraban para los micrófonos de la SER que si así se podía ahorrar la energía suficiente les parece "una temperatura ideal" sin embargo muchos afirman que con esas temperaturas no se puede ahorrar lo necesario, que son "insignificantes" y que no son viables con las temperaturas actuales, explican que deberían haberse considerado las zonas en la que se aplica ya que las temperaturas son muy diferentes. Por último mostraban cierta incertidumbre ante los negocios contemplados en las excepciones ya que las floristerías aclaraban que esperaban estar incluidas en la excepciones para no perder el género pero que no lo tenían claro.

Apagado de escaparates

Aquí encontramos mayor consenso, todos coinciden que de las medidas dispuestas es la menos mala, pero de nuevo generaba posiciones opuestas. Mientras la mayoría acepta que solamente pierden 1 o 2 horas de encendido, o ni eso, porque apagan las luces tras cerrar, muchos se mostraban preocupados ya que al ser los días más largos, aunque el comercio este cerrado, creen que los posibles compradores sí ven estos escaparates a estas horas y eso puede perjudicarlos. Plantean la "extrañeza" de cara al invierno de ver todo el alumbrado propio de las fiestas mientras los comercios permanecen apagados. También han mencionado que algunas calles quedarán "muy oscuras" y que temen que esto genere inseguridad.