Sociedad

Una mirada diferente de un festival diferente

Charlamos con dos asistentes al festival para comprobar su percepción sobre esta 25 edición

Una mirada diferente de un festival diferente

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Aranda de Duero

Sonorama Ribera es un festival diferente, pero también queríamos aplicarle una mirada diferente, más aún de esa 25 edición. Ha logrado ser intergeneracional, lograr unir varios estilos musicales amparados bajo un mismo alma. Pero, ¿cómo se ve desde fuera? Se lo hemos preguntado a Paco Santamaría, fotógrafo de adopción arandina de la Agencia EFE. y Adrián del Campo, periodista aunque acudiera como mero espectador desde León al festival, como hace cada año.

"Disfruto porque me gusta mi trabajo, pero estar detrás de los escenarios y ver el movimiento es un espectáculo que nadie ve, de durísimo trabajo, de mucho curro, y de mucha gente que hace que los demás lo vean. Cuando acaba un festival siempre ha sido el mejor y eso es algo positivo. Siempre Aranda ha estado con más gente. Es una frase que se repite todos los años y eso es bueno porque significa que va evolucionando. Todo se puede mejorar pero va por un camino estupendo, y muchas generaciones nuevas se están uniendo al carro, personas competentes para que esto pueda continuar. Hay un impacto económico brutal, directo e indirecto. Hay más de 1000 puestos de trabajo. Es como la lotería, cuando toca aquí pero no a ti. Prefieres que le toque al vecino; indirectamente te va a llegar", explica Paco Santamaría.

"Lo he vivido con intensidad porque Sonorama es el momento más esperado porque me da energía para el resto del año. Y lo mejor es la Plaza del Trigo, es lo que diferencia de otros festivales. Es ese algo que transforma a la ciudad, no se debe perder, y la gente debemos cuidarlo y apreciarlo, aunque vengamos de fuera. El concierto de C.Tangana me chocaba. Tenía la duda de si iba a merecer la pena, masificar todo, y que viniera gente que 'no comparte' ese espíritu que suele tener el público. El espectáculo me parece una pasada pero era todo muy medido, y esa interacción público-artista se perdió un poquito", asevera del Campo.

La charla puede reproducirse en el audio superior.

 
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