La Ribera del Duero y el enoturismo triunfan en verano
Arzuaga y Don Carlos han trabajado "muy bien" en estos últimos meses y, aunque confían en mantener el nivel en otoño, se muestran desconfiados hacia el futuro más cercano
La Ribera del Duero y el enoturismo triunfan en verano
Ribera del Duero
Aún quedan semanas por disfrutar del verano pero gran parte de esta estación ya se ha consumido. Y sin lugar a dudas, el turismo de interior se ha puesto de moda pese a que la playa se haya reactivado, y la Ribera del Duero ha vuelto a ser un reclamo para que muchos hayan elegido pasar parte de sus vacaciones o un simple fin de semana en la comarca para conocer el enoturismo y nuestra rica gastronomía, además de otros muchos aspectos que nos destacan, como el patrimonio o la naturaleza. Ha quedado patente este miércoles en nuestro espacio con la Ruta del Vino Ribera del Duero.
"Estoy con ganas de vacaciones porque hemos tenido mucho trabajo, así que estamos contentos. Nosotros hemos tenido una ocupación alta, al igual que el año pasado porque la gente no viajaba fuera, y nuestro miedo era mantener la temporada pasada y estamos contentos por cómo ha ido el verano", afirma la reconocida Amaya Arzuaga, del Complejo enoturístico Arzuaga. que sobre todo se congratula de que el perfil que suele acudir ahora a hacer enoturismo sea gente joven "sobre los 30 años de media", además de que se ha elevado el conocimiento de vinos.
Alberto Lara, de Bodega Don Carlos, comparte el análisis de estos pasados meses. "Estoy de acuerdo porque el año pasado debido a la falta de playa y esos motivos que todos conocemos tuvimos un julio atípico, porque antes eran de bajada, lógicamente. Pero aunque este año la gente haya salido en bandada, mucha gente de interior viene a ver esta zona y le llama mucho el enoturismo, por lo que hemos trabajado mucho y muy bien", asevera.
Futuro
Aunque el presente se haya trabajado bien, las previsiones de futuro son opacas, más allá de una época de vendimia y meses posteriores que se esperan de mucho trabajo ya que, al final, "es temporada alta para nosotros". Sin embargo, de cara al próximo año aún no se conoce lo que está por llegar y eso genera un poco de "pánico", como esgrime Amaya Arzuaga. "No pinta bien la cosa aunque confío en que las pequeñas escapadas de Madrid por cercanía nos toquen a nosotros", define, compartiendo Alberto su visión con la confianza "de que todo pueda arreglarse" porque "nos han asustado a todos".