Más madera
El Festival Ebrovisión cierra las puertas con buena salud y promesas de futuro
Miranda de Ebro
La jornada del sábado del Festival Ebrovisión dejó patente que goza de buena salud. Y así lo atestigua la afluencia de público desde el mediodía en el que Ebrovisión se traslada momentáneamente a las calles del Casco Viejo.
Mientras los dj´s Brummel y Blutasky amenizaban la espera, largas colas se iban formando para la degustación que ofrecían los participantes en la Muestra Gastronómica, bajo un sol de justicia. Acero, Bornachea, Botánico, La Corrala, Cresta, Mercado, Mima, Tómbola y La Vasca ofrecieron sus pinchos o raciones por 4 euros.
Y como tras llenar la panza viene la danza, en la Plaza Santa María sonaron los acordes de Mi Buenaventura (locales y conocidos, ellos) y de Los Bengala, además de alguna que otra iniciativa paralela (sorprendentes los Zalomon Grass en La Rayuela).
Y vuelta al Multifuncional, que abría el escenario principal a las 9 de la noche con los chicos de La Habitación Roja y su pop-rock suave y sin estridencias.
Subieron despues a las tablas los madrileños Rufus T. Firefly, acompañados por la cantautora Annie B. Sweet.
Y llegó la hora de las celebraciones del 20º Aniversario. La Asociación Rafael Izquierdo puso en marcha una puesta en escena que pretendía celebrar pasado, presente y futuro del Festival. Porrones, tarta, caramelos y, como no, el cumpleaños feliz coreado por los asistentes. Promesas de cambios importantes en la ubicación del Festival en el próximo año dejaron en el aire ese punto de sorpresa que lleva sobrevolando el Festival durante toda la edición.
Y para terminar de celebrar, no podían faltar Sidonie, que fueron aplaudidos y celebrados de manera intensa, como suele ser habitual cada vez que arriban a Miranda.
A falta del concierto de cierre el domigo a mediodía, esto es lo que dió de sí el 20º Festival de Ebrovisión en el año 2022.
Se lo contamos aquí, en Ser Miranda
Gotzon Martínez
SER Miranda