Donde no llega la música de las grandes bandas llega La M.O.D.A. en su apuesta por el medio rural

Aranda de Duero

La Maravillosa Orquesta del Alcohol (M.O.D.A.) ha vuelto a demostrar su compromiso con el territorio. Y ha ido más allá, específicamente con el entorno rural. En 2019, la banda burgalesa impulsó un proyecto de cuatro conciertos acústicos en pueblos de Burgos con el objeto de dar visibilidad a localidades de muy baja densidad de población. Frías, Villadiego, Valle de Valdivieso y Hontoria del Pinar fueron las primeras poblaciones que disfrutaron de su música y en este 2022 se ha retomado el proyecto con conciertos en Pampliega, Poza de la Sal y Covarrubias. El futuro está por escribirse en presente pero la intención es dar continuidad a la propuesta.

Un baño de multitudes en cada uno de los conciertos para las siete integrantes del grupo, muchas emociones compartidas con miles de seguidores y la constatación de que, cuando se quiere, muchas veces los hechos solo empiezan por un sueño y siete pequeños pueblos han tenido derecho a abrir puertas y ventanas de par en par a la cultura, algo que, por imposición, alcanzaba la condición de utopía hasta que llegó La M.O.D.A.

El vocalista de La Maravillosa Orquesta del Alcohol, David Ruiz, ha explicado en los micrófonos de la SER en Aranda de Duero que “estamos todavía un poco sin bajar de la nueve y muy emocionados. Son conciertos diferentes, muy especiales. Para nosotros significa mucho compartir nuestras canciones con la gente que ha nacido y se ha criado en el mismo sitio que lo hemos hecho nosotros y con la gente con la que tenemos tantas cosas en común. Y después, también te emociona ver a la gente tan agradecida, tan volcada y tan cercana. Ese amor que te llega te sobrepasa”.

David Ruiz explica en la SER que “no somos los primeros que tocan en pueblos tan pequeños pero sí recogimos esa idea. Vimos que el grupo estaba creciendo más allá de lo que nosotros podíamos esperar y notábamos que cada vez nos escuchaba más gente y que sería bonito aportar algo nosotros a la gente de esta tierra que tanto nos estaba dando. La única manera que sabemos hacerlo es con la música y con los conciertos. En 2019 empezamos y queríamos seguir cada año, llegó la pandemia, y hemos vuelto ahora para devolver tanto cariño que nos ha dado la gente”.

La lista de peticiones es larga. Son muchos los pueblos que están a la espera de que La M.O.D.A dé un concierto en su localidad. En su día pedimos que los pueblos que se quisieran sumar a esta iniciativa nos lo hicieran saber, hubo una gran respuesta. Y de esa lista vamos a ir tirando. Queremos intentar mantener la idea de hacer los conciertos en pueblos de 100 a 500 habitantes e incluso menos de 100 personas. Pedimos paciencia porque en toda la provincia todos los pueblos son igual de importantes pero no podemos ir a todos a la vez y además queremos que a los pueblos no les cueste nada. Lo único que necesitamos es un punto de luz y luego los pueblos se están volcando. Merece la pena lo que estamos haciendo” .

David Ruiz confía en que puede cambiarse la dinámica de una despoblación que parece imparable: “Las personas tenemos un cierto nivel de posibilidad de cambio. Individualmente no somos nadie y podemos cambiar un poquito de lo que tenemos a nuestra alrededor. Detrás de las iniciativas personales y colectivas tiene que haber una respuesta de las administraciones y de los políticos, que son quienes deben pensar en mejorar la vida de las personas en el medio rural. Lo que nosotros hacemos es un soplido en medio del océano. Solo somos un grupo de música de una ciudad del norte de España y no somos nada más. Intentamos con nuestra música y estas acciones poner el foco en el medio rural, que salgan nuestros pueblos en los medios de comunicación, que pueda venir gente de fuera de nuestra tierra a conocerla como ha sido en este caso, que puedan venir a hacer turismo el día de mañana y que conozcan lo que hay aquí.  También que la gente de los pueblos sienta que la música ha llegado a su localidad y no tienen que viajar para ver un concierto. Pero está claro que sin la respuesta de las administraciones y de los políticos es muy difícil que esto llegue a ningún sitio”.