La UBU y las policías Nacional y Local se unen para combatir las novatadas universitarias
Los cuerpos policiales y la institución académica advierten que se emplearán todos los recursos para evitarlas y que los alumnos que las cometas serán sancionados administrativa y académicamente.
Burgos
La mayor parte de las novatadas incurren en el ámbito delictivo, implicando actos de humillación y vejación que la Universidad de Burgos y los cuerpos de seguridad están decididos a no permitir, según han manifestado el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, el rector de la UBU, Manuel Pérez Mateos, y la concejala de Seguridad del Ayuntamiento de Burgos, Blanca Carpintero.
En una reunión mantenida en la sede de la Subdelegación del Gobierno, en la que también estuvieron presentes el comisario jefe accidental, Benito Martínez, el subjefe de la Policía Local, Juan Ignacio Romo, y la vicerrectora de Estudiantes, Verónica Calderón, el subdelegado fue tajante al afirmar que las novatadas suponen “hechos graves y punibles, que suponen auténticas vejaciones que se presentan bajo el pretexto de ser una tradición más”.
El rector Pérez Mateos ha apelado a la responsabilidad y madurez de los estudiantes universitarios, “confiando en que a partir del día 12 de septiembre, en el que arranca el nuevo curso académico, no se produzcan este tipo de ilícitos que caen en la perversión de disfrazar como algo divertido lo que no es otra cosa que actos vejatorios y humillantes contra los alumnos de nuevo ingreso”. Igualmente, el rector recordó que desde 2015 existe un reglamento universitario que prohíbe expresamente las novatadas y que la institución académica está dispuesta a la apertura de expedientes sancionadores a quien las promueva y realice.
“Es realmente una paradoja que la pertenencia a una institución en la que se cursan estudios superiores, que debe ser la cuna del conocimiento y la época más enriquecedora en el crecimiento de cualquier joven, suponga urdir planes para vejar a quienes acaban de ingresar. Esto no se debe normalizar, ni se debe obviar ni se le debe restar importancia; es una aberración y la única respuesta va a ser la contundencia en la prevención y en la actuación en caso de que sucediera”, recalca el subdelegado.