"Porque fueron, somos"
Ribera del Duero reconoce el papel del movimiento cooperativista en el mantenimiento de las viñas como germen de la Denominación de Origen otorgándoles el título "Herencia Ribera"
Aranda de Duero
Corrían los años 70 del siglo XX y cada vez menos agricultores apostaban por mantener las viñas en sus cultivos. Cereal y remolacha requerían menos dedicación y daban más beneficios y el arranque del viñedo era una práctica habitual. Sin embargo hubo quienes mantuvieron la tradición de sus mayores en la comarca ribereña y en muchos casos gracias a sentirse apoyados por formar parte de un colectivo: la cooperativa. En ese empeño casi romántico, heroico y un poco temerario puede encontrarse el germen de lo que hoy es una potente industria vitivinícola con el nombre de Ribera del Duero. Medio siglo separa la decadencia de la viña de su floreciente presente en la comarca ribereña y su Consejo Regulador ha querido homenajear al movimiento cooperativista como uno de los artífices de esta evolución y sobre todo de haber sido responsables de mantener el cultivo sin el que nada de lo demás hubiera sido posible. Lo ha hecho designando con el título "Herencia Ribera" a las cooperativas vitivinícolas más veteranas de la Denominación de Origen en el transcurso de los actos de la V Gran Fiesta de la Vendimia durante la tarde de este sábado.
Tras la explicación de los motivos, los representantes de las cooperativas elegidas para representar a todo el colectivo han recibido una botella de vino Ribera del Duero con la etiqueta conmemorativa de la celebración y han tenido oportunidad de ofrecer unas palabras en las que han mostrado orgullosos por su historia y confiados en el futuro, pese a las dificultades.
El homenaje a las cooperativas ha sido el punto de partida de la sesión vespertina y última de la Gran Fiesta de la Vendimia de este año 2022, que ha continuado con el humor de los monologuista Raúl Cimas y del ribereño del año de esta edición, JJ Vaquero, que en una primera intervención conjunta han demostrado que saben hacer humor adaptado a las localidades que visitan, con referencias a las obras de la Avenida Castilla e incluso a los rótulos de algunos negocios del polígono que a la vez que sacan pecho del orgullo español acogen sin problema negocios asiáticos.
Las actuaciones de ambos humoristas han vuelto a abarrotar la Plaza Mayor, donde las bodegas no han parado de descorchar botellas, acompañadas de aperitivos y jamón recién cortado a cuchillo.
Paralelamente y a la espera de los conciertos de la noche, las calles del centro han tenido su propia banda sonora con los siempre geniales y ya habituales de esta cita Pixie and Dixie Band y su jazz ligero, pegadizo y bailable.
La música ha vuelto a la Plaza Mayor con la voz que consiguió alzarse este año con el premio "Talento Ribera" que otorga el Consejo Regulador coincidiendo con la celebración de Sonorama, Claudia Halley, con una extraordinaria mezcla de delicadeza y energía, con sonidos del siglo XXI pero con evocación a los inigualables años 80.
Los encargados de ponerle salsa a la cena o sus aperitivos previos han sido La Cabra Mecánica, que no han dejado en el tintero ninguno de sus éxitos, coreados con entusiasmo por un público que ha vuelto a dejar pequeña la Plaza Mayor arandina
Y a la altura del día y medio de fiesta ha estado su final, con la energía y la diversión de las dos estrellas de Los40, Dani Moreno El Gallo y David Álvarez, con su DJ Club Session, cumpliendo las expectativas de los asistentes, que no han dejado de saltar, bailar, subir los brazos y alzar las copas durante más de dos horas y media de show.
Las dos jornadas de esta V Gran Fiesta de la Vendimia han dejado claro que en los últimos años hemos aprendido lo divertida que puede ser la "normalidad".
Elena Lastra
Redactora jefe de la Cadena SER en Aranda y presentadora de 'Hoy por Hoy Aranda'