Palencia se vuelca con la causa de las mujeres afganas entregando declaraciones institucionales a la activista Massouda Kohistani
La activista ha visitado Palencia invitada por Amnistia Internacional
Palencia se vuelca con la causa de las mujeres afganas entregando declaraciones institucionales a la activista Massouda Kohistani / Ana Mellado
Palencia
La activista afgana Massouda Kohistani visita Palencia invitada por Amnistia Internacional. Hoy ha tenido lugar una recepción por parte del Ayuntamiento y la Diputación de Palencia en la que se le ha hecho entrega de las declaraciones institucionales aprobadas en los ayuntamientos de Ampudia, Astudillo, Barruelo de Santullan, Cordovilla la Real, Dueñas, Herrera de Pisuerga, Monzón de Campos, Osorno, Palencia, Paredes de Nava y Venta de Baños, así como en la Diputación provincial, en el marco de la campaña de apoyo y solidaridad internacional con las niñas y mujeres afganas que Amnistía Internacional lanzó a comienzos de año.
En las declaraciones aprobadas se solicita abordar los derechos de las mujeres y las niñas asignando fondos y proyectos de derechos de las mujeres, apoyando las evacuaciones desde Afganistán y garantizando el reconocimiento de la condición de refugiadas a todas las mujeres y niñas afganas por el peligro de persecución por motivos de género que corren si son devueltas, entre otras medidas.
Tras la recepción Kohistani ha participado en diversas actividades en el IES Recesvinto en Venta de Baños y por la tarde participará en la Fundación Díaz Caneja en las Jornadas de Cine, Mujer y Derechos humanos, con la charla "Ser mujer en Afganistán" y la posterior proyección de la película Hava, Maryam y Ayesha. Su visita finalizará el viernes 14 con un visita al IES Victorio Macho de la capital palentina.
¿Quién es Massouda Kohistani?
Activista social, defensora de los derechos de la mujer y activista política afgana, que reside actualmente en Barcelona con el apoyo de la organización CEPAIM (Fundación sin ánimo de lucro de Acción Integral con Migrantes). Massouda es activista de los derechos civiles, activista feminista y política. Es Licenciada en Administración de Empresas y tuvo que huir de su país, Afganistán, cuando se encontraba haciendo un Máster sobre Temas de Género. Desde 2008, había estado trabajando en la «Unidad de Investigación y Evaluación de Afganistán». Se trata de una organización de investigación independiente financiada por diferentes gobiernos y agencias. Funciona como laboratorio de ideas o instituto de investigación compartiendo sus resultados con el fin de mejorar la situación social del país. El trabajo de Massouda combinaba la gestión de proyectos, la consultoría y la investigación política con diferentes grupos de interés. Recientemente participó como Facilitadora en la JIRGA Nacional sobre Consultas para la PAZ, antecedente del Proceso de Doha para la Paz en Afganistán.
Red de Mujeres Afganas
En 2018, entró a formar parte de la Red de Mujeres Afganas. Esta organización trabajaba para el Proceso de la Paz a un nivel tanto nacional como internacional. Especialmente desde 2015, esta ONG estaba enfocada a la participación de la mujer en asuntos públicos, como la presencia de mujeres en el Gobierno.
Después de la llegada de los talibanes al gobierno en agosto de 2022, convocó la primera manifestación contra ellos, ayudó a otras mujeres a ser evacuadas y jugó un importante papel en la creación de redes de apoyo a las mujeres en Afganistán.
En nuestro país ha venido participando en varias conferencias y también ha colaborado con periodistas para denunciar la actual situación de su país. Está todavía conectada con otros activistas afganos y convocó, en Salamanca, una manifestación contra los Talibán. En esta manifestación pidió a las Naciones Unidas y a otras instituciones internacionales como la Unión Europea que no reconozcan el gobierno Talibán. Por el contrario, les pidió el reconocimiento del Frente de Resistencia de Afganistán como representante legitimo de Afganistan.
Cabe recordar que el 15 de agosto del 2021, los talibanes tomaron el poder en Afganistán. Y con eso, el control sobre los derechos humanos de las personas que viven allí, poniendo en riesgo, especialmente, a mujeres y niñas.
Hasta entonces, las mujeres y niñas afganas podían ir al colegio y universidades, ser dueñas de sus propios negocios y ocupar cargos políticos. Pero ahora, la gran mayoría tienen que quedarse en casa hasta que las leyes vuelvan a tenerlas en cuenta. Pero la persecución a mujeres no es sólo en la educación. Están limitando su derecho a la libertad de movimiento, libertad de expresión y asociación e incluso que puedan vestir como quieran.
