La catedral de Ávila incorpora la realidad virtual para mostrar todos sus secretos

Ávila

Volar entre las vidrieras que dan luz a la nave central, o ver de cerca el retablo obra de Berruguete, o sentir como si estuvieras suspendido en el espacio mientras contemplas de cerca el órgano y el coro o las cúpulas de las capillas es una experiencia tan alucinante como sorprendente que es posible gracias a la tecnología de realidad virtual y a las imágenes en 360 grados y en calidad 6K que se han grabado con drones en el interior de la Catedral del Salvador de Ávila.

Esta tecnología se ha aplicado ya en otras dos catedrales, la de Jaén y Astorga. Y llega ahora a este templo que muestra la transición entre el románico y el gótico. En la parte derecha de la nave central se han instalado quince asientos giratorios. Son unos cubos de madera en los que están las gafas de realidad virtual que nos mostrarán los secretos del exterior y del interior de la iglesia.

La experiencia inmersiva dura cuatro minutos y está narrada en cinco idiomas, español, inglés, francés, italiano y alemán. Es tan intensa que puede asustar a quienes tienen vértigo. Para diseñar la visita se han utilizado drones que han grabado en zonas inaccesibles de otra manera. El deán de la catedral, Antonio Collado, destaca que de esta forma el templo será más accesible para el público en general pero en especial para las personas con discapacidad motora.

ArtiSplendore es la empresa que ha diseñado el proyecto. Su director, Francisco Muñoz, explica que "la gente va a tener la sensación de que vuela", y que así se puede "enseñar, pasear, visitar la catedral como nunca antes se había hecho".

La experiencia virtual se incluye en el precio de la entrada al templo.

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