Alicia del Pozo: "La nacional 122 no es un problema de Peñafiel, es un problema nacional"

Aranda de Duero

El exprocurador en Cortes, José Ignacio Delgado, califica la autovía del Duero como la "autovía de la vergüenza". Décadas de abandono, dejadez y falta de sensibilidad hacia territorios a los que no solo se niega un recurso indispensable para su desarrollo. El drama es el elevado número de víctimas que forman parte de una estadística a la que parece no prestarse atención desde las administraciones. La tragedia son las vidas sesgadas en esta carretera o personas que han quedado maltrechas por algún accidente. Y en medio de esa insensibilidad, la plataforma A11 Pasos lidera, como un oasis en medio del desierto, las reivindicaciones que afectan a muchos territorios que no pasan del recurso del pataleo pero que no se suman a una lucha más activa.

Alicia del Pozo, integrante de la plataforma ciudadana A11 pasos expresa, antes los últimos accidentes acontecidos que “cada vez que hay una noticia de estas se nos parte el alma porque esto es una infraestructura que lleva treinta años proyectada y desde entonces tiene un montón de muertos a sus espaldas que se podrían haber evitado”.

Este colectivo surgió “hace cuatro años reivindicando esta infraestructura a raíz del hartazgo de la ciudadanía. Hemos visto que esta era una sangría constante. Un grupo de ciudadanos de Peñafiel nos movilizamos para que el proyecto saliera del cajón en el que estaba, muy parado. Se han ido moviendo cosas pero, en el caso de Peñafiel, el tramo que le afecta está incluso sin proyecto”.

Un grupo de ciudadanos representa una reivindicación cargada de argumentos frente a la insensatez de quienes no impulsan desde su responsabilidad una infraestructura indispensable. Y quizá demasiado solos frente a un problema de gran magnitud porque ninguna otra ciudad se suma en una lucha tan activa: “Sí tenemos la sensación de estar predicando en el desierto. Hay momentos en los que flojeas pero, ocurren accidentes, y nos movilizamos. Es verdad que la sensación que tenemos es la de predicar en el desierto. Sí tenemos esa sensación de vernos un poco solos. Esto no es un problema solo de Peñafiel. Esta carretera es un eje trasversal este-oeste que, por desgracia, pasa por la mitad de nuestro municipio con todo su tráfico pesado. La última víctima mortal era un vecino de Boecillo. Hay muchas plazas de distintos sectores de la sanidad o la educación que no se cubren porque hay gente que no quiere coger esta carretera diariamente. Y cuando llueve o nieva es más peligrosa aún. Pero no es un problema de Peñafiel, esto es un problema nacional”.

Las razones que explican este abandono se han ido convirtiendo en mitos que tratan de justificarlo pero quizá ninguna tan ruin como la expuesta por Alicia del Pozo: "Hemos llamado a todas las puertas. En una ocasión nos dijeron que esa carretera no tiene rédito electoral porque representamos muy pocos votos y no interesamos. Pero no nos resignamos. Nosotros ya no sabemos qué hacer pero no nos rendimos. Lo que sabemos hacer es esto. Movilizaciones pacíficas. Nosotros no quemamos contenedores y hacemos lo que sabemos hacer para reivindicar esta infraestructura”.