Así están las candidaturas a la alcaldía de Palencia

Palencia

Las elecciones del próximo 28 de mayo no van a ser al uso. Salvo que Fernández Mañueco, presidente de la Junta, dé la sorpresa, por primera vez serán unos comicios exclusivamente municipales. Con ese componente, la elección de candidato o candidata a la alcaldía cobra mayor relevancia. La incógnita está en hasta qué punto pesará la convulsa política nacional en el resultado. En cuanto a los candidatos, a estas alturas del año se preveía conocer si no todos, al menos la inmensa mayoría. En algún caso los plazos se van dilatando y hay quien anuncia que no dará a conocer su propuesta a la alcaldía hasta febrero de 2023.

La más madrugadora fue la socialista Miriam Andrés. Frente a quien reprocha su dilatada trayectoria en la vida municipal, la candidata del PSOE esgrime un argumento que en el partido es imbatible: ganó las últimas elecciones municipales. No lo hizo con mayoría absoluta y un intercambio de cromos entre Ciudadanos y PP hurtó la alcaldía a quien la acarició con la punta de los dedos. Al final, como es sabido, el regidor municipal fue quien menos votos tuvo entre los posibles, Mario Simón del partido naranja.

También sabemos quién será la candidata de VOX. Radio Palencia de la Cadena SER avanzaba este viernes que repetirá Sonia Lalanda. En la mes había alguna opción más, aunque finalmente ha predominado la de la actual concejal de dicho partido, la única representación que obtenía la formación en los pasados comicios. La incógnita está ahora en si VOX se ha estancado, tiende a la baja o si , por el contrario, rompe su techo actual y consigue una representación mayor. En algunos momentos se daba por seguro que Lalanda no iba a repetir, especialmente después de renunciar a la presidencia del partido que pasó a manos de David Hierro. FTras algunas polémicas internas, VOX ha considerado que la actual concejal es su mejor baza.

Queda por saber quién será el candidato o candidata del PP (e incluso habría que conocer si lo saben ellos). Ha habido todo tipo de quinielas. Desde las que situaban a la presidenta del PP y de la Diputación, Ángeles Armisén, como candidata, hasta las que hablaban del concejal de Hacienda, Luis Miguel Cárcel (parece que nunca ha querido tal responsabilidad), En medio asomaron los nombres de la concejala de Cultura, Turismo y Fiestas, Laura Lombraña (que se sepa no está afiliada y el cariz de independiente no suele convencer a los popes del PP y el del concejal de Deportes y Juventud, Víctor Torres (entusiasta, aunque quizá deba forjarse más en la vida municipal). Las últimas quinielas, las que han sonado más fuerte, apuestan (otra vez) por Alfonso Polanco como candidato (de cara al electorado tiene como estigma el ir perdiendo una mayoría que fue aplastante y el hecho de que cediera la alcaldía a Ciudadanos, partido que fue mucho menos votado, sin ni siquiera rechistar).

A la izquierda del PSOE se espera una confluencia con Podemos (Ganemos parece amortizado tras pasar de cuatro representantes a tan solo uno en la actual corporación, la concejala Sonia Ordóñez). Si esa confluencia se produce (de momento Izquierda Unida pone sobre la mesa a Rodrigo San Martín), en el PSOE tienen una esperanza; la de una formación a su izquierda que al ir unida consiga al menos dos concejales. Si el PSOE repite resultado y obtiene once, tendría garantizada la gobernabilidad.

En Ciudadanos las esperanzas son pocas (prácticamente nulas). Todo apunta a que perderá toda la representación que tiene en la actualidad en la corporación (tres concejales). A unan deriva del partido que conduce a su más que probable extinción, hay que añadir una gestión nacional convulsa que acabará con los pocos muebles que se puedan salvar. En Ciudadanos todos coinciden en que el único candidato posible es el actual alcalde, Mario Simón. Si queda una mínima posibilidad de obtener representación, es a través de una candidatura de quien ha regido los destinos de la capital.

Sin embargo, en estas elecciones entra en juego una nueva opción que puede dar una auténtica sorpresa (desde esa opción se nos apunta que aspiran a conseguir cinco concejales, lo que sería un hito. Estamos hablando de ¡Vamos Palencia! con el presidente de los autónomos de Castilla y León, Domiciano Curiel, como una de las caras visibles (de hecho, muchos piensan que encabezará la candidatura, aunque eso no se sabrá hasta febrero del año que viene). Si ¡Vamos Palencia tiene la llave, ya anuncia que dejará gobernar a la candidatura más votada (lo mismo dijo Ciudadanos y no cumplió, pero ¡Vamos Palencia! tiene una ventaja; es libre. No depende de un gran partido que aplique el rodillo y que le obligue a 'tragar' con decisiones externas). Así las cosas, la próxima convocatoria electoral se presenta ilusionante en la ciudad: un PSOE que piensa que esta puede ser su ocasión y que, sino la es marcará el fin de la vida municipal de Miriam Andrés, un PP que mira de reojo a ¡Vamos Palencia!, un Ciudadanos que suspira por no desaparecer y una opción (la de IU y Podemos) que busca confluir por si es necesaria para un gobierno de izquierdas. Y que no se nos olvide, una plataforma, ¡Vamos Palencia!, que está convencida de que va a dar la sorpresa en una ciudad que requiere de liderazgos para reflotar. No en vano, más del 70 por ciento de la población que se ha perdido en un año en la provincia pertenece a la capital.