ASAJA exige a cooperativas y empresas que se paguen "la calidad" de los productos bercianos
Ponferrada
La organización agraria ASAJA reivindica a las cooperativas y empresas agrícolas del Bierzo que paguen los productos agrícolas como corresponde a la calidad que les diferencia. Es uno de los principales inconvenientes, dice el sindicato, a la hora de que se incorporen al campo nuevos agricultores, a pesar de que en esta zona de la provincia es en la única que todavía hay unas mil hectáreas de terreno de regadío en desuso. Es el tirón de orejas con el que el responsable regional de ASAJA, José Antonio Turrado, ha querido hacer balance a un año que ha sido nefasto para el campo, tanto por las condiciones meteorológicas como por la subida de los costes, los incendios la falta de suministros. Así y todo, y a pesar de que la producción es escasa, la compensación económica a los productores es mínima, la situación se hace insostenible para quienes son la base de las propias marcas de garantía, dijo Turrado.
Es necesario, añade Turrado, que esta situación cambie. De hecho, el presidente de ASAJA-León, Arsenio García, lamentó que la imagen de la comarca sea la que todavía tiene más hectáreas baldías o “a poulo”.
Si a esto sumamos las dificultades que acarrea el minifundismo, la apuesta es complicada. Por eso, la responsable de Asaja Bierzo, Begoña Bello, pide a la Junta de Castilla y León que adapte las condiciones de las subvenciones a las características especiales del ámbito rural berciano, aunque este año, puntualiza Turrado, ni las ha sacado ni tiene intención de hacerlo.
Turrado sí que ha hecho referencia a la importancia que tiene la decisión del Gobierno de excluir el IRPF de la tributación fiscal de la PAC, la supresión del IVA en los productos frescos, la disposición de las “cláusulas espejo” para los productos procedentes de fuera de la Unión Europea o la posibilidad de revisar las políticas europeas y nacionales que “anteponen cuestiones medioambientales a la producción de alimentos”. Además remarcó la importancia que tiene la modificación de la normativa que permite volver a quemar los restos de poda o que regula adecuadamente la responsabilidad de las administraciones por los daños de animales en las cosechas, con medidas de prevención incluidas.
Con todo, Turrado confía en que el 2023 se produzca un cambio que permita al Bierzo crecer en su producción agrícola.
