El Crucifijo no volverá al Salón de Plenos del Ayuntamiento de Palencia

Palencia

Vox y Partido Popular se han quedado solos en su defensa de la vuelta del Crucifijo al Salón de Plenos del Ayuntamiento de Palencia que fue retirado por orden del alcalde, Mario Simón, en cumplimiento a la Ley. Ambas formaciones políticas han coincidido en señalar que debía haber sido el Pleno y no el regidor quien adoptara la decisión apelando a la tradición cristiana de los palentinos y haciendo referencia a distintas sentencias judiciales que han dado la razón, en otras partes de España, a esta misma demanda.

Vox ha defendido que el Crucifijo se ha retirado sin guardar la legalidad, han demandado que se vuelva a colocar en su sitio y que sea el Pleno el que decida cuándo y cómo debe quitarse si es que procede. Sonia Lalanda ha insistido en el respeto a la libertad religiosa en especial a las convicciones de católicos y cristianos, en el desprecio sistemático de la Ley por parte de la izquierda, y en la defensa de sus propios principios. El PP se ha sumado a ese debate asegurando que se apoyan en la jurisprudencia y en la tradición para mantener su postura ya que la presencia del Crucifijo no afecta al funcionamiento normal de las sesiones. Víctor Torres ha a provechado para recriminar al alcalde que adoptara la decisión sin comunicárselo a su socio de Gobierno.

Por su parte, Ganemos se ha negado a debatir calificando a los integrantes de Vox como "mamporreros" por ir contra la legalidad. Ciudadanos ha defendido que, desde la posición de la alcaldía, respetan todas las religiones y creencias y que han adoptado la decisión de retirar el Crucifijo en cumplimiento de la legalidad vigente manteniendo únicamente los símbolos contemplados que son un ejemplar de la Constitución y el retrato de SM el Rey. Por su parte el PSOE ha insistido en que mantener el Crucifijo vulnera la neutralidad del Estado y se entra en conflicto con otras religiones que es obligación de todos respetar.