El Consejo Comarcal aprobará el coto micológico "con o sin Ponferrada"
Las discrepancias entre técnicos "paralizan" la primera cesión de competencias de un ayuntamiento al Consejo Comarcal
Ponferrada
"Con o sin Ponferrada", el Consejo Comarcal del Bierzo quiere tener listo para la próxima campaña de otoño la aprobación del parque micológico del Bierzo, un coto que ya dispone de número de clasificación, LE-50049, y que estará compuesto por 16.853 hectáreas. Así lo ha indicado el presidente de la institución berciana, Gerardo Álvarez Courel, quien reconoce que las discrepancias entre técnicos de esta institución y del ayuntamiento de Ponferrada está retrasando la descripción de las bases del convenio que se llevará sí o sí al pleno del Consejo Comarcal en las próximas semanas.
A modo de ultimátum, el presidente de la institución berciana da por buena la interpretación jurídica que realizan sus técnicos, que choca con la que hacen los municipales y que paraliza la suma de 4.000 hectáreas más al parque, al que sí que pertenecerán 30 juntas vecinales de la comarca que han cedido al consejo comarcal la posibilidad de gestión micológica de los montes. Desde el ayuntamiento de Ponferrada, el concejal de Medio Rural y promotor del coto en el Consejo Comarcal, Iván Alonso, confía en que pronto se desenrede el nudo técnico y el macroparque sea el ejemplo de la primera competencia que asuma históricamente el Consejo cedida por un ayuntamiento.
Un parque para la que la entidad berciana aprobó una ordenanza en mayo de 2019. Esa ordenanza tendrá también modificaciones para dar cabida, entre otras, a peticiones como la que ha realizado la asociación micológica Cantharellus que incorporan la figura de “recolector comarcal”, lo que supone también una modificación a efectos de tasas.
Así lo indicaba Courel durante la presentación de la campaña de información sobre setas tóxicas y comestibles que ha iniciado Cantharellus y que se puede visualizar mediante dos carteles, uno verde y otro rojo, compuesto por medio centenar de fotografías realizadas por Juan José Gago cada uno que permiten distinguir entre hongos culinarios y venenosos. El trabajo de un cuarto de siglo de esta asociación va sin embargo mucho más allá, la idea inmediata, dice Manuel Bernardo, es configurar una guía con 1.500 especies que han catalogado tras su localización en la comarca del Bierzo.
Todo en busca de una gestión que de dinero a los pueblos y que permita como objetivo prioritario la incorporación de este producto a las denominaciones de origen del Bierzo.
Bernardo agradeció el apoyo económico de 3.000 euros que la institución berciana les ha dado para realizar algunas de sus actividades, pero apeló a la posibilidad de que ese apoyo puntual se transforme en un convenio que de estabilidad en el tiempo a esta ayuda.
