Si lo imaginas, está en Aranda
Derroche de imaginación y colorido en un desfile familiar que ha reunido imaginativos disfraces con las apuestas más clásicas
Aranda de Duero
Caballeros y damas medievales bailando salsa, toreros que cambian la muleta por el saxofón, glamurosos mendigos, y el alumnado de Hogwarts a ritmo de reguetón. O un astronauta bebiendo en bota. Escenas tan peculiares como que en Aranda se registren 16 grados de temperatura a las siete de la tarde de un 18 de febrero. El tiempo se ha aliado para hacer las delicias del numerosísimo público que se ha echado a la calle este sábado para disfrutar del ambiente canavalero de la capital ribereña.
Muestra de que toda combinación divertida y estimulante tiene cabida en un desfile como el de este sábado de Carnaval en Aranda, que ha superado la apuesta de años anteriores con un derroche de fantasía desplegado por agrupaciones, grupos, parejas y familias. De nuevo con la colaboración de AMPAS, peñas, y agrupaciones, además de familias, grupos de amigos y alguna pareja que han desplegado su creatividad e ingenio.
Si ha habido una nota característica de este desfile ha sido la explosión de color de muchos disfraces, en cintas y juegos malabares, en las aspas de molinillos de viento o en espectaculares amuletos indios.
Algunas felices coincidencias han hecho que Picasso haya tenido dos homenajes en su centenario.
O que otros dos grupos hayan echado su imaginación a volar para conquistar el universo con naves espaciales y trajes de astronautas.
Ha habido también otros homenajes, como el dedicado al cine en pantalla grande, con un numeroso grupo de cajas de palomitas, taquillas y carteles de películas.
También la música en todas sus vertientes, clásica, moderna, instrumental y vocal, ha recibido el particular respaldo carnavalero en Aranda.
O el terrorífico mundo de los personajes aterradores, liderados por un enorme demonio que ha desfilado entre nubes sulfurosas, seguido de zombies, monjas fantasmas, novias cadáver, vampiros, esqueletos, brujas y personajes directamente sacados de las pantallas, como la Niña del exorcista, el muñeco diabólico o los miembros de la familia Adams.
No han faltado los toques más clásicos de este evento: los Gurús abriendo el desfile con su batucada o el regreso a la edad media, con caballeros armados, elegantes damas y castillo incluido.
La magia del Carnaval, especialmente llegada desde Hogwarts, con Harry Potter, ha conseguido incluso la llegada de un tren a Aranda.
Imprescindible la presencia de piratas, con un barco-carroza, cuyos cofres del tesoro iban llenos de caramelos, o el universo del oeste, carromatos, pistoleros, damas de la Casa de la Pradera y clásicos fotógrafos.
Una de las agrupaciones con carnavaleros y carnavaleras más jovencitos se ha sumergido en el precioso y diverso mundo submarino, con peces, medusas, caballitos de mar, cangrejos y el mismísimo Neptuno.
Clásica es también en Aranda la participación de la Asociación de Vecinos Santa Catalina, siguiendo la estela de sus vistosos y elegantes disfraces, aludiendo siempre a la tierra, en este caso a las brisas del Duero.
Centenares de personas han desfilado de nuevo este año a ritmo de las ocho charangas que han participado, uniendo música y disfraz, e incluso alguna de ellas haciendo rodar barricas por el recorrido del desfile.
También el multitudinario público se ha unido al espíritu de Carnaval, con familias enteras disfrazadas de personajes del universo Marvel, de paella u otro tipo de alimentos, de todo tipo de fauna, doméstica o salvaje, o vestidos de época, de todo tipo de época.
De nuevo las AMPAS de colegios y de alguna Escuela Infantil, peñas asociaciones de vecinos y grupos de amigos han apostado por la imaginación y la diversión en una noche que se ha alargado hasta la madrugada animado por la música y el espectáculo que ha unido en la Plaza Mayor a peces con astronautas y templarios con vampiros.
Para demostrar, un año más, que todo es posible en el Carnaval de Aranda.
Elena Lastra
Redactora jefe de la Cadena SER en Aranda y presentadora...