El Río Duero Soria es el campeón de la Copa del Rey de voleibol, que en su 48ª edición se ha celebrado en Soria, en el Pabellón de Los Pajaritos. El equipo anfitrión se impuso en la gran final por 3-1 a Pamesa Teruel, en un duelo que cumplió con las expectativas y ofreció un gran espectáculo a una grada abarrotada de sorianos y turolenses que animaron y disfrutaron por igual. El primer parcial comenzó bastante igualado, aunque Soria empezó a distanciarse en el tanteador hasta firmar un 10-15 con una renta de cinco puntos que obligó a Teruel a pedir un tiempo muerto. Sin embargo, y aunque los naranjas se mantenían dentro del partido, los celestes lograron seguir al frente y plantarse con un 15-21. El set parecía encarrilado para los Alberto Toribio, pero la reacción aragonesa ajustó el tanteador hasta un 22-22, con un parcial de siete a uno. Era el momento de la verdad y ahí aparecieron Pepe Villalba, Lucas Lorente y el «tiburón» Juan Pablo Moreno para decantar el parcial del lado soriano (23-25). Teruel acusaba al enorme esfuerzo de las dos jornadas precedentes doblegando a Guaguas en la semifinal el sábado y a Valencia 3-2 (con un 30-28 en el quinto set) el viernes. No mucho más fresco, Río Duero Soria enfiló pronto la segunda manga con un 0-4, con Pepe Villalba al saque. No se terminaba de encontrar Teruel y el equipo local se aprovechaba, con un Moreno espectacular al saque, para, con rentas que alcanzaron hasta los ocho puntos de diferencia, llegar a de nuevo al 15-21. No hubo esta vez lugar a la sorpresa ni a la reacción rival y el 2-0 cayó del lado celeste con un 16-25. Y, como suele pasar cuando se gana un set con holgura, el siguiente tiene dos posibilidades: hundimiento del derrotado y paseo para el vencedor, o bajón del vencedor y reacción del derrotado. Fue esto último y Teruel se puso por delante en el marcador desde el primer momento, salvo en un puntual 12-13, para llevarse el punto con solvencia por 25-23. El cuarto y definitivo set empezó igualado. Alternancia en el marcador hasta el 8-8, momento en que Soria se puso definitivamente por delante, con un 8-10. El punto de inflexión lo protagonizó Juan Pablo Moreno con tres saques seguidos colocando el luminoso en un 10-15. La final estaba encarrilada con una ventaja para los de Toribio de entorno a los cuatro ó cinco puntos para acabar cerrando el parcial con un 21-25 que llevó el delirio a jugadores celestes y su afición. De este modo el Río Duero Soria, que este año cumple sus diez años como club refundado en 2013, celebra su primer título. Para el voleibol soriano es la cuarta Copa del Rey, la última conseguida en el año 2008 bajo la denominación de Numancia.