La “operación política” de Félix Rodríguez de la Fuente

Aranda de Duero

La Asociación En Medio de Abril cuenta esta tarde con Benigno Varillas, el autor de un libro que se titula ‘Luchar, lo libre’. Habla de un proyecto frustrado en la transición hacia la democracia, que podría haber llevado a Félix Rodríguez de la Fuente a formar parte del Gobierno de España.

En 1977 se creó un Partido Ecológico para que Rodríguez de la Fuente se presentara a las elecciones. A través de lo abordado en su programa de Radio Nacional de España y de lo publicado por el autor en el diario El País, el autor de esta publicación reconstruye los acontecimientos de ese trepidante año en el que se desaprovechó la oportunidad de un cambio importante que hubiera podido marcar para bien el futuro medioambiental de nuestro país.

“La Operación Política”, como la denominaba Félix, se desbarató. Se perdió la oportunidad de que el único país que estaba en una situación óptima, única e irrepetible, para ensayar la transición ecológica con un modelo de desarrollo sostenible, lo hiciera.

Rodríguez de la Fuente, como toda su generación, se declaraba al margen de la política. No tenía interés en ningún partido ni ideología. Pero coincidía y estaba en contacto con estrategas de la globalización como Julian Huxley, David Rockerfeller, el Príncipe Bernardo de Holanda y otros que promovieron Naciones Unidas al poco de ganar la II Guerra Mundial en 1945 y buscaban un salto evolutivo de la humanidad con un nuevo orden basado en la ciencia de la Ecología.

En 1977 estaban redactando la Estrategia Mundial del Desarrollo Sostenible que en España presentó Rodríguez de la Fuente ante los Reyes y el Gobierno, nueve días antes de que se matara, al estrellarse su avioneta en territorio de Alaska.

Si había un lugar en el que ensayar la transición ecológica era España, recién salida de una dictadura, con un líder social capaz de arrastrar a las masas y de ganar el voto de la derecha, el centro y de sectores progresistas con un programa de cambio radical.

Unas pocas personas, pero bien situadas, se opusieron. Él mismo dijo la frase de que, en 1977 “habíamos perdido el tren” para cambiar el modelo de desarrollo de España y transformar su naturaleza en uno de los principales activos económicos, en lugar de destruirla, como se ha seguido haciendo hasta el día de hoy.

El salón de actos de los sindicatos, en la plaza del Trigo, acoge la presentación de este libro a las siete de la tarde.