La primavera volverá a poner 'patas arriba' a los alérgicos

Valladolid

Llega la temporada de estornudos, de picor de ojos, la congestión nasal, el lagrimeo, la tos seca y la dificultad respiratoria para los alérgicos al polen. Y es que, aunque las alergias están durante todo el año, es ahora en la primavera cuando aparecen los síntomas de las personas que tienen sensibilidad al polen.

La presencia de pólenes y esporas de hongos en el aire en elevadas concentraciones, afecta de manera directa a toda la población mundial, debido a la inhalación de estas partículas que vuelan por el aire que respiramos. Según la OMS, para 2050, al menos una de cada dos personas sufrirá un trastorno alérgico como resultado de la progresiva contaminación del aire asociada con las emisiones de gases tóxicos y el cambio climático. El polen en el aire y las alergias asociadas son temas esenciales en salud pública durante la temporada de polinización, dada la repercusión clínica, la disminución en la calidad de vida, las bajas laborales y pérdidas económicas que provocan.

En la entrevista mantenida en A vivir que son dos días Castilla y León, la doctora Alicia Armentia, médico especialista de alergia en el Hospital Río Hortega de Valladolid, ha explicado la importancia de que los pacientes acudan al médico de atención primaria si tienen sospechas de que podrían ser alérgicos: "El diagnostico alergológico es fundamental. Tenemos una estrecha relación con los médicos de familia", explica Armentia.

En España hay 14 millones de personas con algún tipo de alergia, 700.000 de ellas en Castilla y León, y una importante parte de ellos no están diagnosticados.

¿Cómo será la primavera para los alérgicos?

Esta es la pregunta que se hacen los alérgicos cada año cuando se estrena esta estación. De la respuesta dependerá su salud en los próximos meses. Y la Dra. Armentia tiene una respuesta: "Todavía no tenemos las previsiones de la Sociedad de Alergia e Inmunología Clínica que son los que dan los datos más precisos. Lo único que sabemos que es que como el polen y otros contaminantes de la biosfera han estado desde siempre, volverán a estar y en un nivel considerable para causar síntomas alérgicos. La buena noticia es que disponemos de datos que aseguran que será una primavera muy lluviosa y los pólenes como necesitan ser llevados por el viento en un aire seco para propagarse, la lluvia les va a dificultar esta propagación y entonces es posible que se retrase, pero cuando deje de llover, la floración será mayor, si bien estos pólenes serán menos agresivos al haber sido tratados con la lluvia, serán menos agresivos desde el punto de vista alergénico".

En España, el polen de gramíneas es el más predominante, así como también el que más sintomatología alérgica causa. Los meses de floración de las gramíneas dependen del clima, que en España podemos clasificar en tres grandes regiones: la zona seca continental, la zona del mediterráneo y el norte lluvioso. En la zona seca continental, las primaveras son cada vez más prolongadas, por lo que la explosión floral de las gramíneas dura un mayor período de tiempo. En el mediterráneo, en cambio, el clima es más suave y la floración más lenta y menos intensa, empezando en marzo hasta finales de agosto. En la España verde de gran pluviosidad, la floración dura desde enero hasta julio pero las lluvias frecuentes provocan un efecto barrido sobre el polen, que explica los pocos granos encontrados en relación a la abundancia de prados.