La arquitectura ambiental de Ponferrada, un desafío de gestión en el Día Internacional del Árbol

Ponferrada

Árboles para Vivir, es el referente que marca el día Internacional de los Bosques y que en Ponferrada tiene como desafíos una serie de proyectos que modificarán la arquitectura ambiental de la ciudad en los próximos años, ideas como el anillo verde o el bosque urbano en la recuperación del espacio de la montaña de carbón marcarán la integración del entorno en los espacios urbanos. Por eso, el equipo de gobierno de Ponferrada mantiene su confianza en la posibilidad de que reciban la cuantía económica que merecen de los fondos de Transición Justa. Es preferible, indica Ramón, presentarse a una nueva convocatoria de fondos, que saldrá este año, que intentarlo a través del plazo de alegaciones.

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Mientras tanto, en el campus del Bierzo se ha alzado hoy la voz para exigir más implicación a las administraciones en la preservación no solo de la masa forestal sino también en la correcta atención a los árboles monumentales. De hecho, el botánico Bernabé Moya lamenta el olvido al que sigue sometido el ciprés de la Anunciada de Villafranca, un ejemplar para el que nadie mira y que sin embargo, según su criterio, es único a nivel internacional y que además está en pleno Camino de Santiago.

Bernabé recuerda la cara opuesta que ha supuesto en Ponferrada la apuesta del ayuntamiento por la conservación de la Glicinia, hoy convertida en el segundo lugar más fotografiado de Ponferrada. Y es que es preferible primar la calidad de los ejemplares por encima de la falsa idea de mejorar la calidad del aire con constantes plantaciones. Así lo cree el jefe de la unidad técnica de jardinería y arboricultura del Real Jardín botánico, Mariano Sánchez, presente como ponente de un programa de intervenciones que concluirá a las 7 de la tarde.