Salamanca se convierte nuevamente este viernes en la capital mundial del español
Se celebrará el día en el Centro Internacional del Español con la jornada "Salamanca, ciudad del español y punto de encuentro de la Iberofonía"
Salamanca
Los embajadores de Honduras, Marlon Brevé Reyes, República de Corea, Bahk Sahnghoon, y Suiza, Hans Peter Mock, así como el Encargado de Negocios de la Embajada de Mozambique en España, Víctor Velho, se darán cita este viernes, día 14, en el Centro Internacional del Español para participar en la jornada "Salamanca, ciudad del español y punto de encuentro de la Iberofonía", donde hablarán sobre la situación de este idioma en sus respectivos países y analizarán los retos de futuro.
Dicha jornada, con entrada libre hasta completar el aforo, volverá a convertir a Salamanca en la ciudad del español por excelencia a nivel mundial, bajo la organización del Ayuntamiento de Salamanca, la Universidad de Salamanca (USAL), la Academia de la Diplomacia y la Fundación Universitaria Iberoamericana (FUNIBER).
En este mismo marco de análisis y debate también participará el Dr. Frigdiano Álvaro Durántez Prados, director de Relaciones Internacionales de FUNIBER y pionero e impulsor del concepto geopolítico de la Iberofonía, que propugna la articulación de un espacio multinacional de países de lenguas española y portuguesa de todos los continentes sin excepciones geográficas. Este espacio, compuesto por una treintena de países y 900 millones de habitantes, la décima parte de la población mundial y que ocupa la quinta parte de la superficie del planeta, constituye el primer bloque geolingüistico del mundo.
A través de este nuevo acto internacional, Salamanca, alma mater de las universidades hispanoamericanas, se continúa posicionando como lugar esencial para la lengua española. Cabe recordar que el año pasado más de 20 embajadores de la Unión Europea y del resto del mundo, que representan a más de 400 millones de habitantes, rindieron homenaje a la capital salmantina como la cuna de los derechos humanos gracias a la obra de la Escuela de Salamanca y Francisco de Vitoria.