¿Sólo me pasa a mí?

Palencia

Es una duda que tengo muy a menudo, sobre todo cuando me encuentro con acontecimientos abrumadores, sobre los que tengo una opinión crítica y diferente y parece que voy contra corriente.

La última vez, ha sido este fin de semana - y los días previos con los preparativos- digo este fin de semana con todo lo que nos hemos tenido que tragar con la coronación del Rey de Inglaterra.

¿Por qué han considerado esto un acontecimiento que nos afecta a toda la gente, a toda la gente corriente?, tanto como para que esté implicada la televisión pública española. Me parece excesivo, inapropiado y por eso digo sólo me pasa a mí o hay más gente que considera fuera de lugar ese despliegue. Nosotros de dosis de monarquía ya tenemos bastante: dos reyes, dos reinas, princesas, infantas, de todo.

Quienes dirigen, los propietarios de las cadenas televisivas han decidido que nuestro foco de interés y de preocupación está en ver el lujo, el derroche, los privilegios de unos pocos “la realeza y los poderosos, frente a los súbditos a la plebe”.

No sé si le pasa a más gente, pero a mí, ya me resulta difícil entender que alguien en 2023, tenga el poder, la jefatura del estado por haber nacido en una determinada familia, por tener un apellido, sinceramente me recuerda a la edad media, pero creo que los que ostenta el privilegio, también quieren repetir esa imagen de la edad media, es la única manera de explicar que, en el siglo XXI, se paseen en carrozas doradas y se pongan coronas con unos trajes imposibles. Esto sin cuestionarse si son las personas apropiadas, si son las personas más preparadas, cuáles son sus virtudes y sus valores, a fin de cuentas, son los jefes del estado.

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Nadie más se cuestiona que necesidad tenemos de aguantar estos empachos de monarquías, esta ostentación y exhibición de lujos, incluso esa representación feudal de sometimiento de los súbditos. ¿sólo me pasa a mí?

Lo digo en serio, como me gustaría que se empezase a cuestionar estas cosas desde quienes tienen voz y medios para hacerlo, como me gustaría que, desde los medios de comunicación, sobre todo desde la televisión pública poder escuchar opiniones críticas con estas temáticas y se dedicasen a ofrecer a la ciudadanía problemas cotidianos, de la gente corriente.

Y mientras llega ese momento, quienes como yo tienen una opinión crítica sobre los acontecimientos reales, al menos vamos a desahogarnos en voz alta