Un alcalde muy importante para Aranda pero poco reconocido
Calixto Seijas fue el primer edil de la capital ribereña en la llegada de la Segunda República a España, pero también precursor de los vinos de la Ribera del Duero

Calixto Seijas / CADENA SER

Aranda de Duero
La lista de alcaldes de Aranda de Duero es amplia. Pero antes de la llegada de la democracia, tal y como la conocemos, hubo otros primeros ediles en la ciudad. Algunos de ellos apenas tienen reconocimiento o recuerdo, pese a que su labor fue imprescindible, al menos en cuanto a los sucesos históricos que les rodearon en su día. Es el caso de Calixto Seijas. Fue el elegido en abril de 1931, tras unas elecciones que repasábamos esta misma semana en La Ventana Edición Ribera con Máximo López Vilaboa, y en las que a la hora de conformar el gobierno, el consistorio de la capital ribereña estaba repleto de ciudadanos expectantes ante el cambio que se avecinaba. "El corresponsal de Diario de Burgos se sorprende porque los pasillos del Ayuntamiento ya estaban llenos con proporciones que incluso se catalogan de alarmantes por la propia estructura del edificio", indica Maxi.
Esa sesión concretamente tuvo lugar el 21 de abril, y Calixto se correspondía con la candidatura popular. Al asumir el cargo expresa que su “mayor sacrificio es aceptar el cargo, pero lo hace con gusto por servir a la República que ha de traer el bien de España”. Terminó la sesión dando el nuevo alcalde un ¡Viva la República! que, según las crónicas, “fue contestado unánimemente por los demás concejales y el público que ocupaba el salón”.

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Su labor
Calixto Seijas ocupó la alcaldía en dos momentos fundamentales para la historia de Aranda como son la proclamación de la República y los primeros compases de la Guerra Civil. No obstante, si por algo se ha convertido Calixto Seijas en un personaje histórico, es por haber sido uno de los padres, si no el más destacado, de los vinos de la Ribera del Duero. Había nacido en Hontoria de Valdearados, donde su padre José Seijas Galarraga, originario de Santiago de Compostela, estaba destinado como médico. Por su madre, Regina Ruiz Zorrilla, estaba emparentado con el político republicano Manuel Ruiz Zorrilla. Calixto Seijas contrae matrimonio en febrero de 1901 con Guadalupe Rozas, quien fallecerá dos años más tarde. Se casa en segundas nupcias con la prima de su primera esposa, María Martínez Gómez.
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El nuevo alcalde de Aranda plantó viñas en unas fincas medio abandonadas que, estando en el término de la capital ribereña, lindaban con el término municipal de Castrillo de la Vega, en el paraje de Torremilanos. Estas tierras proceden del patrimonio familiar de su esposa fallecida y de la segunda, así como otras que había ido comprando. Aprende de la tradición centenaria del vino, pero empieza a embotellarlo para que pueda ser consumido fuera utilizando las más novedosas tecnologías francesas. Los primeros vinos eran claretes, los llamados “ojo de gallo” con una coloración similar al 'tinto Burdeos'. El vino de Torremilanos va adquiriendo fama por su gran calidad y se va adentrando en las mejores mesas de España. Calixto Seijas empezó a elaborar sus vinos en una bodega de la calle Costanilla y, con el espectacular aumento de su comercialización, se trasladó a una bodega más amplia, en la calle Isilla, la vía más céntrica de Aranda. Esta bodega es donde actualmente está el restaurante El Lagar de Isilla. La imagen de Calixto Seijas se ha popularizado en la actualidad al ser el protagonista de la etiqueta del vino Montecastrillo, uno de los caldos de Torremilanos. También emprendió un negocio de telas en la Plaza Mayor.

Jorge Alvarado
Periodista. Responsable Digital de la SER en Aranda. Presentador de Hoy por Hoy Peñafiel y El Banquillo...




