38 comentarios, 120 minutos. Punto y...

Palencia

Buenos días, fue el día de San Antolín cuando Juanfran me llamó para ofrecerme hacer un comentario semanal en el microespacio Las claves de la semana; mi respuesta fue inmediata, y como tal, no muy pensada.

Para alguien acostumbrado a hablar y no escribir, a ser más de tradición oral e improvisada que escrita y reflexionada, ya el primer comentario, que tenía que ser de un minuto de duración, después de dos horas de escribir y borrar, me puso al borde del abandono prematuro. Yo, que, en mi etapa de sindicalista, casi me tenían que cortar la megafonía en la Plaza Mayor para que no pasara de la media hora, incluso una vez llegué a los 44 minutos, ¡tenía que decir lo que pienso en 60 segundos! Y lo que era más jodido, hacerlo por escrito.

Recibí con alivio cuando me dijeron que el debut se aplazaba una semana, hasta el 15 de septiembre y que, si no me importaba, el comentario semanal sería en el programa local de Hoy por Hoy, con una duración ya de dos minutos. Por el día de la semana que me tocaba, los jueves, supuse que se me asignaba el lugar dejado por Domi Curiel, que iniciaba, por aquellos días, una exitosa andadura política que le ha llevado al Ayuntamiento y a la Dipu. La política palentina ganaba un buen tipo y la SER, qué se yo, pongan ustedes la nota, ahora que estamos en junio.

A algún amigo le dije: no sé si pasaré de Navidad, se me acabarán los temas, pero, al final, ha habido semanas que he tenido que elegir entre varios asuntos de actualidad. Y así, como escribió Lope de Vega, burla, burlando, he salvado de septiembre a junio.

En estos 38 comentarios, con sus más de dos horas acumuladas de opinión, espero haber conseguido mi principal objetivo: extender la práctica del pensamiento crítico, de la duda y del uso de la crítica constructiva. Espero que ustedes hayan aplicado, también, el pensamiento crítico a mis comentarios.

Aunque sea una batalla de David contra Goliat, creo haber plantado cara a las tres P que amenazan desde dentro nuestra sociedad democrática: el populismo, la postverdad y la polarización. Les aconsejo que en el próximo mes se pertrechen contra estas pes, decidan contra ellas, les va su futuro social y personal, su pensión, su salario, su sanidad, su educación y el futuro las mujeres de su entorno. Si alguna vez he podido abusar de datos era por esto, porque dato, mata relato, dato, hace más difícil la mentira.

Lo que no he cumplido es con el tiempo máximo de 120 segundos que me pidió Alberto, para los pernianos el hijo de Don José Luís el médico. He de confesar que al principio me agobiaba esta lógica limitación radiofónica, pero al ver que mis colegas Elisa, Eva, Charo y Guillermo rara vez bajaban de los tres minutos, 180 segundos, pensé para mí que la bronca, que nunca la hubo más allá de alguna indicación, habría de ser a todos o a ninguno. Este frente, también lo salvé.

Además, el poder enviar los comentarios por Whats App, me permitió hacer uno desde Buenos Aires, donde fuimos a la boda de la bisnieta de Benito Gómez, mi tío abuelo, un emigrante de Piedrasluengas que a principios del siglo XX cogió la maleta, tras su amada, y, en busca de fortuna, cruzó el Atlántico. Ver emocionarse a mi familia y nuevos amigos argentinos, cuando enviaba la grabación, fue algo imborrable y siempre se lo agradeceré a la Cadena SER de Palencia. Gracias a todos los integrantes de esta emisora, además de los dichos, a Ana, a Bea a la que no siempre mis correos le llegaban con el documento adjunto, a todos y todas. Gracias a todos ustedes, a los que coinciden con mis opiniones y a los que no. Hoy tampoco voy a cumplir con los dos minutos.

Al final se me ha hecho corto. 38 comentarios, 120 minutos, ya sea punto y seguido o punto y aparte sólo me queda desearles que disfruten de la vida y que hagan disfrutar de ella a los demás.