La Junta y Michelin establecen pautas para la integración de la mujer en la automoción
El protocolo que han firmado pretende fomentar la igualdad, la prevención de la violencia de género y la feminización de determinadas áreas de trabajo
Imagen de la firma del protocolo
Aranda de Duero
La Junta de Castilla y León firma con las factorías que tiene Michelin en Aranda de Duero y Valladolid un protocolo de colaboración para establecer la unidad de acción para seguir impulsando la integración de la mujer en el ámbito de la automoción.
Durante el largo camino ya recorrido por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, en el que ha venido impulsando el empleo femenino en sectores productivos muy masculinizados, ha encontrado en la multinacional francesa un nuevo aliado con una amplia trayectoria promoviendo la igualdad entre sus 3.000 trabajadores.
La titular de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, durante la firma celebrada en las instalaciones vallisoletanas de la compañía, destacaba el compromiso no solo con las políticas de igualdad y la prevención de la violencia de género, sino con el liderazgo femenino. Y lo ha ejemplificado en la directora general de Michelin para España y Portugal, María de la Paz Robina, con quien ha suscrito el acuerdo. La consejera le ha agradecido la disposición de colaborar con la Junta de Castilla y León a través de este texto, que refleja la voluntad que la empresa lleva mostrando desde hace años. No en vano, recibió el distintivo ‘Óptima’ en el año 2018.
Se trata de un paso importante para avanzar en el proyecto ‘Empresas de Castilla y León comprometidas con la igualdad’, con el que se aúna la responsabilidad social de las grandes empresas de la Comunidad con las políticas de igualdad y la prevención de la violencia de género. Así, Michelin se suma a otras compañías y entidades emblemáticas como Gullón, Caja Rural de Zamora, Leche Gaza, FCC, Execyl o Caixabank. Un acuerdo para actuar en el ámbito del empleo, espacio en el que se manifiestan muchas de las desigualdades, y acabar con las brechas salariales, romper los techos de cristal y avanzar en la conciliación. Tal y como ha puesto de manifiesto Isabel Blanco, no es sólo una cuestión ética, sino también estratégica, un factor de competitividad empresarial.
Acuerdos recogidos en el protocolo
El protocolo suscrito por Familia e Igualdad de Oportunidades y Michelin recoge un marco de colaboración de al menos dos años, prorrogables por otros dos, y centrado en cuatro áreas: la realización de formación para trabajadores en el ámbito de la igualdad en la empresa, el desarrollo de itinerarios formativos y sociolaborales para mujeres del medio rural, el fomento a la inserción de la mujer en el mercado de trabajo −con especial consideración a las mujeres en situación de vulnerabilidad− y, por último, el impulso del programa ‘Igualdad sobre ruedas’, a través de un proyecto de colaboración público y social que une empleo femenino con innovación social.
El programa recogido en este último punto es una iniciativa de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, basado en la transferencia de conocimiento, cuyo propósito es la transformación de los procesos productivos ligados a la fuerza física masculina en puestos de trabajo que precisen de una tarea intelectual, a través de la robotización y la electrónica. Una fórmula que iguala las condiciones de acceso a ambos sexos y de la que Michelin será pionera para, posteriormente, poder ser difundida a otras empresas.
Entre los compromisos asumidos por la Junta se encuentran: la formación online en la promoción de la igualdad y la prevención de la violencia de género para trabajadores de Michelin; un servicio personalizado de asesoramiento para implantar medidas y planes de igualdad, junto con todas las prestaciones del programa ‘IOEmpresas’; poner a disposición de la compañía los canales del ‘Programa Empleo Mujer Castilla y León’ (Pemcyl) para inserción laboral de las mujeres más vulnerables; y fortalecer el liderazgo femenino a través de guías y premios.
Mientras, la compañía de origen francés se compromete a facilitar dicha formación con perspectiva de género en corresponsabilidad, pero también a detectar esas necesidades formativas orientadas esencialmente a la mujer rural o con dificultades con acceso al empleo, con el objetivo último de integrarse en Michelin. Además, fomentará la presencia femenina en los ámbitos en los que están infrarrepresentadas, como en mandos directivos y áreas STEM −ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas−, desarrollando guías didácticas y metodológicas, y promoviendo jornadas de puertas abiertas. Se integrará en la Red de empresas del programa Pemcyl, colaborará con el Banco de Buenas Prácticas ubicado en el portal web de la Junta y se compromete también a la difusión del logo contra la violencia de género de la Administración autonómica cada 25 de noviembre, Día Internacional Contra la Violencia de Género.
En definitiva, el protocolo no sólo fija unos objetivos concretos como son la promoción de la igualdad, la prevención de la violencia de género y la feminización de determinadas áreas de trabajo, sino que establece un amplio abanico de iniciativas, medidas y pautas para alcanzarlos.
