La víctima de la 'estafa divina': "Dios me llamaba y me decía que el dinero rentaba más en los bancos del cielo"

León

Rocambolesco caso el que se ha juzgado este miércoles en la Audiencia Provincial de León. La Fiscalía pide 8 años de prisión para un vecino de León acusado de estafar más de 200.000 euros a un mujer de avanzada edad haciéndose pasar por Dios o la Virgen. Presuntamente, se habría aprovechado del estado mental de la misma, que está convencida de que la Virgen la nombró santa, para timarle esa cantidad de dinero a través de varias entregas entre 2014 y 2019.

Supuestamente, se ponía en contacto con ella a través del teléfono haciéndose pasar por Dios o la Virgen y pidiéndole que depositase cantidades cada vez mayores de dinero en un cajón que se encontraba en su tienda de tratamientos naturales y que denominaba “el banco del cielo”. Le decía que el interés allí rentaba más que en los bancos de la tierra y que además podría construirse una casa en el cielo junto a las de su madre y su marido ya fallecidos.

El acusado ha negado los hechos a pesar de que en el juicio se ha escuchado una grabación en la que fingía varias voces para hablar con la mujer y la amenazaba con “matar a sus hijos y dejarla sola en la vida” si contaba algo. Eso sucedió cuando ella, acosada por las deudas, les contó todo a sus hijos. El acusado ha dicho que se limitó a seguirle la corriente para que abandonase el local y no le causase problemas con los clientes.

También ha declarado la víctima. Sigue convencida de que ha sido nombrada santa. "Yo soy santa desde 2013. En un viaje en coche sentí unas manos en los hombros y al llegar a casa me llevaron al baño", ha declarado. "Allí, en el espejo escribió con sangre 'Soy la Virgen, aquí derramo toda mi sangre. Hija mía eres santa. Borra esto con esa esponja' ". Pero es consciente de que todo el asunto del dinero es fruto de una estafa. Entregó todos sus ahorros y llegó a pedir dos créditos para cumplir con las entregas. “Me quede sin dinero ni para una barra de pan”, ha dicho.

El dinero no ha aparecido pero el acusado cerró su negocio, que ha reconocido generaba deudas, unos meses después de que se presentase la denuncia y se cortasen las aportaciones.

La Fiscalía pide 8 años de cárcel para el acusado por un delito de estafa.