El radiocontrol facilita la coexistencia entre el oso y los vecinos de su hábitat

Ponferrada

La Consejería de Medio Ambiente tiene ya instaladas cuatro trampas para facilitar la geolocalización de osos pardos en Laciana y el Alto Sil. Son recipientes metálicos que capturan al animal sin dañarlo, y que permiten la colocación de un aparato para su posterior seguimiento, de forma que se pueda vigilar su aproximación a zonas urbanizadas. El Consejero de Medio Ambiente ha presentado uno de esos dispositivos en Tejedo del Sil, junto al pedáneo, al alcalde de Palacios, agentes ambientales y al personal del programa Oso Pardo de la Fundación del Patrimonio Natural. Hasta el momento han sido 8 los ejemplares que han sido marcados, 6 de ellos en León, por medio de estas trampas.

Con estos métodos se controla el movimiento del oso y su posible desplazamiento a los pueblos, con los consecuentes riesgos que conlleva para los vecinos. A partir de ahí, las patrullas actúan con medidas aversivas, como el uso de perros de rastreo, para evitar que se repitan las incursiones.

El consejero recuerda que en caso de presencia del oso en el interior de una población, lo más apropiado es llamar al 1-1-2 para que se ponga en marcha el protocolo.

La Junta de Castilla y León tiene contabilizados 370 osos en la zona cantábrica. La mayor parte, 250, en la zona occidental y el resto en la zona oriental de León y Palencia.