Recuerdo y Dignidad localiza en un segundo intento una de las fosas comunes de Adradas
La excavación se realizó durante cuatro días en las zonas que habían indicado los vecinos de esta localidad.
Soria
La Asociación Soriana Recuerdo y Dignidad ha localizado la fosa que contiene los restos mortales de Juan García Gutierrez, concejal de Iruecha, Estanislao Gil Guerrero, maestro de Aguaviva de la Vega, el hijo del sillero de Arcos de Jalón y el médico de Arcos de Jalón, asesinados en octubre de 1936 en Adradas.
Se trataba del segundo intento por parte de la asociación para localizar los restos tras la prospección realizada en marzo de este mismo año. En aquella ocasión se realizaron intervenciones en la zona indicada por algunos vecinos, pero no hubo éxito.
En este segundo intento, se excavó durante cuatro días en los alrededores de las zonas indicadas por los vecinos de Adradas. Los números excavados en ambas prospecciones son de vértigo: Excavación a lo largo de 223 metros, en una superficie de 1756 m2 y 1300 m3 de tierra excavada.
Pese a toda esta tierra movida, los cuerpos no aparecieron en los primeros tres días de trabajo de sol a sol, empleando los días de vacaciones de muchos de sus integrantes o acudiendo con la familia entera en aras de la conciliación con el activismo solidario. Todo cambió con el mensaje que se envió a los miembros de la asociación este lunes por la mañana: "Los tenemos, compañeros".
Aparecieron cuando ya casi no quedaba esperanza de encontrarlos, en un recodo aún no prospectado que se excavó para descartar cualquier duda antes de darlos por irrecuperables. Ha sido más difícil que encontrar una aguja en un pajar
Una vez recuperados, explosión de alegría y puesta en marcha del protocolo de actuación ante la aparición de restos: aviso a las autoridades, anuncio de la buena noticia a la familia que había dejado Adradas descorazonada y convencida de la imposibilidad de recuperarlos, planificación de todo el proceso que se abre ante el hallazgo de las víctimas...
La Guardia Civil estuvo desde el comienzo de la prospección presente o en comunicación permanente con Recuerdo y Dignidad ante la posibilidad de la aparición de víctimas con señales de violencia. Ante el hallazgo de la fosa común se avisó también a la Policía Judicial que custodió los restos óseos desplazados por la máquina a la espera de su entrega al Instituto de Medicina Legal de Soria.
Se recogieron varios metacarpianos y falanges, vértebras cervicales, un cráneo y fragmentos de cráneo, un radio y un cúbito. Una vez extraídos los restos se ha procedido a la protección y geolocalización de la fosa común clandestina a la espera de que se pronuncie el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Almazán del cual depende el municipio de Adradas. Toda la zona intervenida ya ha sido restituida y está en perfectas condiciones.