Siro condiciona su continuidad durante 4 años a importantes recortes salariales
Pone sobre la mesa una bajada del sueldo de los trabajadores de en torno a 150 euros al mes

Fábrica de Galletas Siro en Venta de Baños / Beatriz Álvarez

Palencia
Se siguen sucediendo las reuniones en distintos ámbitos sobre el futuro de Siro. La multinacional propietaria, Cerealto, ha enseñado sus cartas. El grupo galletero condiciona su continuidad durante cuatro años a importantes recortes salariales que afectarían a los 200 empleados de la planta ubicada en Venta de Baños (Palencia, 6.000 habitantes) sobre la que se cierne la amenaza de cierre en un plazo que expiraría en junio de 2024. En las próximas horas se van a suceder los encuentros, el primero de ellos entre la empresa y los sindicatos del Comité de Empresa que intentará que la propuesta empresarial sea menos lesiva para los operarios.
Tal y como se ha informado a los propios trabajadores por parte de los sindicatos en una reciente reunión, Siro garantiza cuatro años más de actividad a cambio de que sus operarios se rebajen el sueldo en torno a 150 euros al mes. También deberán comprometerse a dejar de cobrar el complemento que les paga la empresa si caen de baja. Se trata del conocido como complemento de Incapacidad Temporal, el IT. Las empresas lo pagan de forma "voluntaria" al trabajador cuando se encuentra en situación de baja. En la actualidad habría un elevado número de trabajadores que estarían de baja laboral.
También les rebajarían otra serie de complementos a los que tienen derecho. Como estamos contando, así lo trasladó en una reciente reunión el Comité de Empresa, los sindicatos, a los trabajadores que, finalmente, deberán decidir en asamblea si aceptan este acuerdo en una votación en la que será preciso el voto afirmativo al menos de la mitad más uno de la plantilla. Entre medias, los representantes de los trabajadores intentarán mejorar la propuesta de la empresa. En definitiva, están negociando para "suavizar" el planteamiento de la multinacional galletera. De momento, a la espera de cómo evolucionen los acontecimientos, los sindicatos han declinado hacer declaraciones.
De esta forma, se ha pasado de hablar de posibles inversores para reflotar la galletera venteña, el consejero Carlos Fernández Carriedo, habló de un inversor extranjero interesado, a recorte de derechos laborales para garantizar la continuidad durante cuatro años. Está siendo un agosto intenso en la planta agroalimentaria con varias reuniones. Ahora queda saber si la empresa rebaja esas condiciones, algo que buscarán los sindicatos, y si los trabajadores están dispuestos a aceptar. Algunos de ellos han confirmado a Radio Palencia de la Cadena SER que el planteamiento empresarial que incluye pérdida de derechos ha sentado como un jarro de agua fría.




