A juicio dos hondureños por presuntos delitos sexuales contra una misma joven, menor de 16 años, sobrina e hija de sus agresores
Los hechos ocurrieron en un piso de Aranda en un intervalo de algo más de dos años, en uno de los casos el acusado reconoció a la víctima legalmente como su hija
Aranda de Duero
La Audiencia Provincial de Burgos celebra este mes de septiembre dos juicios, sentando en el banquillo a dos hondureños acusados de cometer en Aranda de Duero sendos delitos sexuales. Se da la circunstancia de que la víctima de estos hechos, que se produjeron con un intervalo de algo más de dos años, es la misma en ambos casos, una adolescente que en el segundo de los episodios no había cumplido aún los 16 años.
En la primera de las causas la fiscalía pide quince años de prisión para el procesado, un hombre de treinta y cinco años al que se le acusa de agredir sexualmente a una sobrina que tenía trece años en ese momento. Los hechos a juzgar se produjeron en octubre de 2018 en el domicilio donde se encontraban sus sobrinos solos. A las cuatro de la madrugada llamó al portero automático con el pretexto de que tenía que ir al baño. Según relata el escrito del fiscal, una vez que el procesado se encontraba dentro de la casa, se dirigió a la habitación en la que dormían la víctima y su hermana. El procesado llamo a la puerta de la habitación y la hermana, adormilada, abrió la puerta, creyendo que eran sus padres y se volvió a su cama, entonces el procesado se desnudó y se introdujo en la cama de la menor, la tapo la boca con la mano y la penetró vaginalmente. La menor consiguió gritar, despertando a su hermana que mantuvo una discusión con el procesado echándole de la casa.
El procesado ha estado en prisión provisional por estos hechos durante 21 días hasta que se acordó la libertad provisional previa prestación de fianza de 5.000 euros y la prohibición de acercamiento y comunicación con la menor durante la tramitación de la causa. Además de la pena de prisión, se propone una orden de alejamiento de un kilómetro de la víctima durante 20 años y una indemnización de 6.000 euros por el daño moral.
Víctima de nuevo dos años después
La vista oral está prevista el 27 de septiembre, una semana después de la que está citado el otro hondureño, de 37 años, imputado en este caso por un delito continuado de abuso sexual a esta misma joven, que no había cumplido aún los 16 en la fecha en que se produjeron los hechos, mayo de 2020.
Según relata el escrito de cargos, en al menos cuatro ocasiones, con ánimo de satisfacer sus instintos libidinosos, aprovechando la situación de parentesco y convivencias, se acercó a la menor, a quien había reconocido legalmente como hija, cuando ésta se encontraba en el domicilio familiar y sin que conste violencia ni intimidación, le dio besos, tocó los pechos y zona vaginal de la menor, sin que ella se opusiera.
La Fiscalía pide en este caso una pena de prisión de 6 años por lo que considera un delito continuado de abuso sexual a una menor de 16 años. También propone 6.000 euros de indemnización por el daño moral y alejamiento de mil metros con respecto a la víctima durante siete años.