El girasol recoge los beneficios de las lluvias tardías

Valladolid

Las precipitaciones tardías, que no beneficiaron todo lo necesario al final del ciclo del cereal, han disparado los rendimientos del girasol en secano. Frente a producciones de 700 kilos por hectárea en el mejor de los casos, este año en secano se está recolectando el doble, y en algunas parcelas de tierras más frescas se está consiguiendo producciones de 2.000 kilos. Los precios, sin embargo, no acompañan al igual que tampoco lo hacen en el resto de cultivos herbáceos. Hoy la pipa de girasol para aceite cotiza en las lonjas a poco más de 400 euros, frente a los 600 euros la tonelada de la campaña pasada.

Producto estrella

El aceite de girasol ha sido uno de los productos estrella del último año. Y muy demandado por los consumidores y la industria de la alimentación ante la subida desorbitada de los precios del aceite de oliva. En algunos supermercados se llegó incluso a restringir su adquisición a un número determinado de botellas.

"Las producciones acompaña, pero los precios no" asegura el presidente provincial de Asaja, Juan Ramón Alonso, que reconoce que este cultivo, considerado por el agricultor como un cultivo refugio ante los altos costes de producción del resto, está teniendo una gran aceptación en el campo. De hecho Valladolid es una de las provincias que más superficie de girasol tiene, con 52.000 hectáreas este año de las 365.000 que se han sembrado en la Comunidad. " Es un cultivo que este año tiene rendimientos muy buenos" asegura Alonso y que ya se está recolectando en la comarca de Tierra de Campos, en el norte de Valladolid.