La Asamblea Ciclista presenta una alternativa al proyecto de carril-bici del Ayuntamiento de Valladolid en Isabel La Católica

La Asamblea Ciclista de Valladolid (ASCIVA) ha presentado de nuevo su propuesta alternativa al plan de modificación del carril-bici del paseo de Isabel la Católica anunciado por el Ayuntamiento de Valladolid y avanzado por el diario El Norte de Castilla. Según han explicado en un comunicado, la Asamblea se reunió con el concejal de Movilidad en agosto y le presentó este mismo diseño alternativo tras conocer su proyecto inicial de modificación. Una idea que fue rechazada porque, tal y como han indicado, el consistorio vallisoletano -gobernado por PP y VOX “ya tenían el proyecto hecho”.

Sin embargo, ahora, "han cambiado el proyecto por completo y han ignorado la propuesta de ASCIVA". La Asamblea Ciclista defiende que Isabel la Católica debería mantenerse en su estado presente con un trazado que es "el mejor posible bajo las circunstancias actuales" y han añadido que "ualquier reforma empeorará necesariamente lo existente para la movilidad ciclista·. Los datos oficiales demuestran que esta vía es utilizada a diario por un gran número de usuarios. ASCIVA ha señalado que ya analizó el primer proyecto propuesto y que ahora ha hecho lo mismo con el nuevo. En él, tal y como recalcan, se eliminaría el carril-bici de la calzada y, en su lugar, se añadiría uno para coches. También se eliminaría parte del paseo peatonal en el parque de las Moreras y la Rosaleda para crear una senda ciclista bidireccional de 2,3 metros de ancho. ASCIVA considera que esto "no es un carril-bici sino un circuito de mountain bike ciclo-turista". A la vista de todo lo anterior, el colectivo entiende que el Ayuntamiento de Valladolid "considera la bicicleta como un medio recreativo y no de transporte", y que, por lo tanto, es "su última prioridad en la movilidad de la ciudad".

ASCIVA considera que la propuesta de este proyecto es "aún peor que la anterior" y lo justifica con varios argumentos. En concreto, porque creará "conflictos con los peatones", porque es más estrecho, indirecto y desconectado, con subidas y bajadas (intersecciones con el puente de Poniente, el puente de Isabel la Católica y el puente Mayor requerirían de subidas/bajadas con notable pendiente), y porque dota de mayor espacio para el vehículo privado, para restarlo del que disponen los peatones y en un lugar con habituales por la celebración del mercadillo.

Propuesta con detalles

Como contrapartida, ASCIVA plantea una alternativa que mantiene el carril-bici en su actual ubicación mediante el desplazamiento de la mediana y la integración del carril bus-taxi a partir del edificio de 'La Electra' hasta la calle de San Quirce. Para ello es necesario desplazar las tomas de las luminarias, varias hileras de maceteros, dos zonas de respiradores del aparcamiento subterráneo y reponer una zona con arbustos. Esta propuesta es "mucho más económica" que el primer proyecto del ayuntamiento, ya que "evita la tala de árboles, evita subidas y bajadas innecesarias, minimiza los conflictos con los peatones, no invade el parque y mantiene un carril-bici amplio que se ha demostrado que cada vez transporta a más personas".

Por otro lado, el pequeño tramo del carril bus-taxi que discurre por esa zona, concluyen desde ASCIVA, está "frecuentemente invadido por vehículos privados", ya que es necesario atravesarlo para acceder a la calle Veinte de Febrero (ahora con menos tráfico tras la peatonalización en 2021), la entrada del aparcamiento de Isabel la Católica, el acceso a Pedro Niño, la salida del aparcamiento de Isabel la Católica, el acceso al de Poniente, y para realizar el giro hacia la plaza, sin olvidar una zona de carga y descarga.

Por último, señalan que para disminuir el volumen de tráfico que atraviesa el Paseo Isabel la Católica en dirección al Puente Mayor, se puede habilitar el carril izquierdo de Isabel la Católica, justo antes de la intersección con la Calle de los Doctrinos, para girar hacia el Puente de Isabel la Católica. ASCIVA considera que es fundamental aprovechar los recursos municipales "de manera responsable" y buscar soluciones "que brinden beneficios a largo plazo para toda la comunidad". ASCIVA, como "defensora de un diálogo abierto y constructivo entre la sociedad civil y las autoridades municipales", insta al Ayuntamiento de Valladolid a considerar esta propuesta alternativa y a establecer un "espacio de diálogo" para discutir los desafíos que plantea la modificación de Isabel la Católica.