Piden diez años de cárcel por la presunta violación de una menor especialmente vulnerable
El acusado contactó con la chica con la excusa de hablar de su sobrino que, al igual que ella, estaba internado en un centro tutelar de menores
Ávila
En la Audiencia Provincial de Ávila ha comenzado un juicio por un presunto delito de agresión sexual que ha sentado en el banquillo a un hombre, mayor de edad y sin antecedentes penales, para el que la fiscalía y la acusación particular piden una pena de 10 años de cárcel por abusar de una menor de edad que se encontraba tutelada por la administración al concurrir en ella factores de desprotección y experiencias traumáticas.
La defensa ha pedido la libre absolución porque considera que no hubo delito y que fue una relación sexual consentida. En el caso de que el juzgador sí considere que hay delito pide que se tenga en cuenta la circunstancia eximente del artículo 20.1 para aquel "que al tiempo de cometer la infracción penal, a causa de cualquier anomalía o alteración psíquica, no pueda comprender la ilicitud del hecho o actuar conforme a esa comprensión".
El acusado dice que la menor "tomó la iniciativa"
Esa es la versión que ha dado el acusado, J.P.F.G., que ha sido el primero en declarar en el juicio. Según su relato ambos se habían conocido porque la chica era amiga de su sobrino que, como ella, vivía en un centro tutelado de menores.
Con la excusa de hablar de algo que le había pasado a su sobrino el acusado quedó con la chica en dos ocasiones. En la primera hablaron brevemente. Fue en la segunda de ellas, el 17 de diciembre de 2020, cuando sucedieron los hechos que se están juzgando.
Ese día él fue con su coche a las inmediaciones del instituto en el que estudiaba durante la hora del recreo. La llevó a dar una vuelta en coche y terminó parando en las inmediaciones de la plaza de Toros. Allí le pidió que le enseñara las cicatrices que ella tenía en distintas partes del cuerpo ya que se autolesionaba. En un momento dado pasaron a la parte de atrás del coche, donde se produjo el acto sexual. Después la volvió a llevar al instituto. En su declaración ha dicho que ella tomó la iniciativa en todo momento y que le dijo que era mayor de edad.
Hora 14 Ávila (04/10/2023)
15:00
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"No puedes moverte, y por dentro gritas pero no puedes gritar"
La víctima, que en 2020 tenía 16 años, ha declarado separada del acusado por un biombo. Su versión ha sido muy distinta. Ha dicho que se montó en el coche por su propia voluntad, que él la llevó a una zona donde no había nadie y que se vió superada por la situación cuando él empezó a desnudarla con la excusa de ver sus cicatrices. Ha explicado que se bloqueó y no pudo hacer nada.
Cuando todo acabó le pidió que la llevara de nuevo al instituto. Una vez allí, ella ha relatado que se encontraba en estado de shock y que llamó a sus educadores para que la ayudaran. La llevaron al hospital donde se llevó a cabo el protocolo de agresiones sexuales y se interpuso la denuncia. Esa misma tarde el acusado fue detenido por la policía.
"No puedes moverte. No puedes hacer nada pero por dentro sientes que no puedes más. Es como quedarse rígido, no puedes hacer nada y por dentro gritas pero no puedes gritar". Con estas palabras ha descrito la víctima que no pudo reaccionar ante la presunta agresión. Sentía "como si no estuviese allí, como si no estuvieras siendo tú", hasta que en un momento dado vio sangre en los dedos del acusado "y volví a conectar con la realidad". Ha dicho que no recordaba los detalles de lo que le hizo porque cuando te pasa algo así lo que quieres es no pensar en ello.
Durante su relato se ha producido un momento especialmente duro en el que ha roto a llorar por lo que se ha hecho un receso de diez minutos.
De forma sucinta se ha mencionado durante el juicio que la menor en su infancia tuvo experiencias traumáticas y ella ha explicado que había sufrido depresión clínica y ansiedad generalizada lo que la había llevado a autolesionarse y a tomar una sobredosis de pastillas, todo ello antes de que ocurrieran los hechos que se juzgan.
Esas circunstancias "han comprometido su desarrollo psicoevolutivo y su madurez", por lo que tiene reconocida una discapacidad de tipo emocional del 35%.
Tras ambas declaraciones el tribunal ha escuchado el testimonio de algunos peritos y el juicio ha quedado visto para sentencia.
SER Ávila
María Ángeles Hernández
Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Es redactora en SER Ávila desde 1994....