La Plataforma Cega el río que nos une, pide la suspensión cautelar de las obras de El Carracillo

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La Plataforma Cega, el rio que nos une, se muestra contraria al inicio de las obras de mejora del regadío en El Carracillo cuya primera piedra se puso el pasado 27 de septiembre con la presencia del vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García Gallardo, entre otras muchas autoridades. Desde el colectivo medioambiental explican que han solicitado la suspensión cautelar de las obras, antes de que se pusiera esa primera piedra y recuerdan que a lo largo del año han presentado recursos al contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Valladolid contra las resoluciones dictadas para realizar este proyecto de trasvase de agua del río Cega y que afecta a los pinares de Gomezserracín.

Según explican desde la Plataforma está pendiente de resolver un contencioso administrativo contra el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico por la modificación de la concesión de aprovechamiento de aguas subterráneas y superficiales a derivar al rio Cega. También están pendientes de resolver otros contenciosos contra la Junta de Castilla y León contra la declaración y autorización de utilidad pública, el interés general y la urgente ejecución de las obras, también contra el plan de obras y contra la prórroga de la declaración de impacto ambiental. Asi mismo recuerdan desde la plataforma "que la concentración de pinares de la zona de Gomezserracín-monte, donde se pretende hacer las obras solamente beneficia a la Comunidad de Regantes de El Carracillo. No la quieren los vecinos en los términos planteados en el proyecto por el grave perjuicio que causaría a los pinares de su propiedad".

Recuerdan que el agua es un bien público fundamental para la vida y la salud y un recurso limitado. Apuntan a que la agricultura intensiva ha sobreexplotado los dos acuíferos subterráneos y afirman que quieren hacer lo mismo con el rio Cega y el acuífero subterráneo en los pinares públicos y privados. Además explican que las cañadas son de dominio público con fines y usos concretos y critican la ocupación de los montes de utilidad pública 29 y 48 que se ocuparán con balsas y sondeos para explotar el acuífero.