Una plantación de 700.000 árboles en Burgos frente al cambio climático y sin dinero público
La empresa burgalesa Land Life Iberia promueve la reforestación en tierras degradadas con financiación de empresas que buscan 'créditos de carbono'
Land Life
Burgos
La empresa Land Life Iberia, con sede en Burgos, ha plantado unos 700.000 árboles en suelos degradados de la provincia de Burgos desde su creación en 2018, con un propósito de restauración ambiental, utilizando técnicas innovadoras y sin recurrir a fondos públicos.
Además de un compromiso altruista con la naturaleza, el secreto del negocio es la captación de empresas con una importante estrategia medioambiental, que financian los proyectos de reforestación a cambio de los llamados 'créditos de carbono', que contribuyen a la descontaminación del planeta en un ejercicio voluntario que también resulta rentable en su balance de resultados.
Antes de la plantación habrán seleccionado los territorios más idóneos y consensuado la intervención con los propietarios, sean ayuntamientos, juntas vecinales o de titularidad privada. En la actuación más reciente, cerca del puerto de La Brújula, supervisan ya los cerca de 97.000 árboles plantados en 102 hectáreas de Fresno de Rodilla y Quintanapalla, que absorberán alrededor de 4 toneladas de dióxido de carbono (CO2) por hectárea de media al año.
Francisco Purroy, director de Land Life Iberia, asegura que las estrategias de acción climática están cada vez más interiorizadas en el tejido empresarial, por la exigencia legal de sostenibilidad, pero también por puro interés corporativo. Todavía son los países escandinavos los más concienciados.
Land Life apuesta por sistemas innovadores de 'reforestación inteligente' para garantizar el crecimiento saludable del árbol y generar el menor impacto climático. La tecnología está presente en todo el proceso de plantación, desde la fase de diseño de los métodos de siembra, la evaluación de riesgos, las condiciones del suelo o el seguimiento y mantenimiento de lo plantado. Francisco Purroy habla de un producto patentado por Land Life que protege el desarrollo de la planta en sus estdios iniciales para fortalecer su resiliencia, al que han llamado Cocoon.
''Cocoon consiste una suerte de incubadora biodegradable que ayuda a los arbolitos a subsistir y a crecer en sus primeras estadios de vida y sobre todo a pasar el primer verano, que es crítico. Ese disco con aspecto de cartón se rellena de agua y rodea al plantón forestal y luego se pone otra tapa también biodegradable que le permite guardar humedad y soltando poco a poco progresivamente esa humedad hacia el cepellón y protegerle de que se pueda secar''.
Desde su sede en Burgos, Land Life emprende proyectos de restauración a gran escala que ya ha producido más de 3 millones de árboles plantados en 3.300 hectáreas en España y Portugal, repartidas en una decena de proyectos, con Castilla y León a la cabeza con 1,3 millones de árboles.
A nivel global, en una red internacional de empresas similares, persiguen restaurar los 2.000 millones de hectáreas degradadas por los incendios, la sequía o el abandono de la actividad rural para contribuir a mitigar los efectos del cambio climático.