COMPROMISO: Jesús Tamayo
Futbolista del Club Deportivo Numancia
Soria
A veces en el fútbol hay jugadores que caen de pie en un club o en un equipo, tanto para la propia entidad como para, normalmente lo más importante, la afición. Sin embargo, hay otros que llegan discretamente y, con el paso de las semanas, de las jornadas o incluso de las temporadas se ganan el corazón de la grada y hasta se convierten en referentes. En el caso de Jesús Tamayo, es algo especial.
El toledano, de 29 años, llegó a Soria después del descenso de Segunda. fue uno de tantos. Esa campaña a la 2021 fue muy compleja ya que el equipo acabó sufriendo un segundo descenso puesto que con la reestructuración de la Segunda División B en Numancia dio con sus huesos en la segunda Federación. Entonces hubo una renovación del vestuario, otra vez, y Tamayo fue uno de los pocos supervivientes. Él decía cuando acordó su continuidad “tengo una deuda con el Numancia y quiero cumplirla. Quiero dejar al equipo lo más alto que pueda”.
En la siguiente temporada, la 21-22, la del ascenso a Primera RFEF, su arranque fue fulgurante con goles y asistencias, pero la mala fortuna se cebó con él con una grave lesión que le dejó KO durante prácticamente dos tercios de la temporada y el inicio de la siguiente. Pese a ello siguió siendo un referente del equipo y de la grada. Consumado el ascenso siguió en el equipo, ya como uno de los capitanes, pero de nuevo las lesiones le impidieron ser un habitual en el campo de juego, pero compensó su escasa participación con su COMPROMISO en esas dos campañas. Una actitud intachable: animando a sus compañeros e incluso haciendo esfuerzos personales para recuperarse cuanto antes de sus lesiones para poder ayudar en el objetivo. Con el de Illescas la palabra compromiso puede que se quede incluso corta.