La mujer encadenada en Miranda no solicita medidas de protección y el hombre detenido está en libertad aunque es reincidente
La Fiscalía solicita que se tome declaración a la perjudicada a fin de valorar la posibilidad de adoptar nuevas medidas cautelares.
Burgos
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Miranda de Ebro, en funciones de guardia, ha acordado la libertad provisional del detenido con la obligación de comparecer cuantas veces sea requerido, bajo el apercibimiento de modificar su situación personal y determinar su ingreso en prisión provisional en caso de no concurrir al llamamiento judicial.
El hombre está siendo investigado por detención ilegal, sin perjuicio de que la calificación pueda variar conforme avance la investigación.
A última hora de la mañana de hoy, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Miranda de Ebro ha recibido un escrito por parte del Ministerio Fiscal en el que solicita que se tome declaración a la perjudicada a fin de valorar la posibilidad de adoptar nuevas medidas cautelares.
El Juzgado ha dictado una providencia acordando la práctica de la diligencia interesada, así como la declaración de un testigo.
Por la fecha en que ocurrieron los hechos investigados, el Juzgado nº 2 de Miranda se inhibirá al Juzgado nº 1, que se encargará de realizar la instrucción, llevar a cabo las diligencias oportunas para esclarecer lo ocurrido, tomar declaración al investigado y a la mujer, y adoptar en su caso posibles medidas cautelares.
La mujer no ha solicitado medidas de protección. Por su parte, la Fiscalía no ha interesado la prisión provisional.
Los hechos ocurrieron el pasado lunes día 20 de noviembre, cuando desde el Hospital Santiago Apóstol de Miranda de Ebro se alertó a los agentes, indicando que en el centro hospitalario se había personado una mujer de mediana edad, la cual presentaba lesiones en la cara y se encontraba maniatada con una cadena de manos a cuello.
Las primeras manifestaciones de la víctima apuntaban a la autoría por parte de un hombre que se habría ofrecido a realizarle el favor de acercarle desde el Hospital, donde la mujer se encontraba al cuidado de una amiga, hasta el centro de la localidad de Miranda en su vehículo. Una vez que se hubo ganado la confianza de la víctima y con la excusa de recoger unos efectos de su domicilio, la víctima accedió a acompañarle al interior de la vivienda, siendo en ese momento en el que comienza a golpear en la cara a la víctima que llegando a perder la consciencia.
Tras recuperar el sentido, la víctima se encontró con una cuerda a la altura del cuello y tirando de la cuerda el presunto autor de los hechos con la intención de asfixiar a la víctima, prosiguiendo con los golpeas en la cara y los insultos. Para impedir cualquier defensa por parte la víctima, el detenido ha añadido al primer amarre una cadena con la que ataba las manos de un extremo y el cuello del otro.
Según las manifestaciones de la víctima a los agentes, en un momento en el que quedó sin la vigilancia de su maltratador aprovechó para huir de la casa, refugiándose en la casa de unos familiares que le acercaron hasta el Hospital de Miranda de Ebro desde donde se alertó a los servicios policiales y procedieron a su atención médica.
Se ha hecho cargo del caso la Unidad de Familiar y Mujer de la Comisaría de Policía Nacional de Miranda, grupo encargado de la investigación de delitos relacionados con el maltrato sobre la mujer y delitos de naturaleza sexual, quien en base a las manifestaciones recogidas tanto a la víctima como a los primeros agentes intervinientes, procedió a la identificación del presunto autor de los hecho, alertando al resto de unidades policiales de cara a su detención.
Una vez detenido y puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Miranda de Ebro se decretó su puesta en libertad.