Arandina-Real Madrid: el partido que Aranda nunca olvidará

Aranda de Duero

Álex Izquierdo tiene derecho a estar hasta el gorro de tanta entrevista. Es un buen orador, pero aún mejor entrenador. Lo dicen sus números. Cuatro temporadas como primer entrenador de la Arandina, el club de su ciudad, al que ascendió hace unos meses a Segunda RFEF tras una temporada histórica, y al que ha llevado -sin olvidarse claro está del papel de los jugadores- a jugarse el pase a octavos de Copa del Rey ante todo un Real Madrid. Tiene una espinita, el inicio de esta liga, que espera quitarse en mayo. Su deseo a los Reyes Magos, aunque llegue tarde, está lanzado. "Que sea una noche mágica, y que en mayo la Arandina esté salvada", afirma.

Este viernes, en nuestro Banquillo de la SER, primero hablamos con él precisamente ahí, en el banquillo. A unos metros tendrá a Carlo Ancelotti. "No sé todavía lo que le voy a decir. Le felicitaré y reconoceré por los logros conseguidos, pero igual en el momento se me ocurre algo", afirma Izquierdo, que mira con satisfacción un estadio muy diferente a lo que es habitualmente. Y preguntado si aún sigue sin creerse lo logrado, dice que precisamente la idea ha sido la contraria. Es decir, asimilar lo que hay delante, para poderle 'perder' el respeto a todo un Real Madrid. Aunque sabe que "es casi imposible" meterle mano a un equipo como el cuadro blanco.

En el vestuario rival

Y cosas del directo, como la sala de prensa estaba ocupada por otra entrevista, nos metemos en el siguiente vestuario con el míster blanquiazul. Es decir, en el visitante. Donde en unas horas se sentarán Camavinga, Bellingham, Luka Modric, Brahim... "Creo que no está mal", dice Álex mirando el vestuario, que aunque no tenga los lujos a los que pueda estar acostumbrado el equipo madridista, es muy digno. "Yo cuando jugaba en el filial me cambiaba alguna vez aquí", apunta.

Izquierdo es constante en la idea de que este enfrentamiento sirva para ilusionar a la ciudad, pero también para que muchos arandinos se animen a seguir al equipo de fútbol de la localidad. Es consciente de que en la segunda vuelta, en liga, "serán importantes".

¿Y después qué?

Y ahí es donde viene el quiz de la cuestión. Porque cuando la 'nube' del Real Madrid se esfume, allá por el lunes 8 de enero, volverá la realidad de una liga en la que la Arandina es colista, a siete puntos de la salvación. Una salvación que es posible, y para un equipo cuyos argumentos sobre el verde no concuerdan con lo que dice la puntuación, aunque el entrenador reconoce que "si estamos ahí, evidentemente es porque hay cosas que no estamos haciendo bien", pero "estoy convencido de que podremos levantar la situación".

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Para lograr el objetivo, también existe la posibilidad de reforzarse en el mercado de invierno, que se abría este pasado lunes. Puede haber refuerzos "buscando no lo cuantitativo, sino lo cualitativo", con "dos fichas sub-23 que tenemos libres" y a sabiendas de la baja durante toda la temporada de Dieguito. Pero eso llegará después de todo el embrollo copero, que a ojos de Álex, debe servir al equipo como metáfora para aplicarlo en la competición doméstica. La Arandina nunca fue de rendirse.

Los análisis de Álex son amplios. Sus jugadores le definen como un apasionado del fútbol modesto. Esta vez habrá tenido que lidiar con nombres y partidos que ven el común de los mortales. Aunque con una mirada diferente a ellos: buscando los puntos flacos a un equipo casi inexpugnable. Casi porque... No hay nada ni nadie invencible o imposible. Que se lo digan al Cádiz.

El Especial Banquillo de la SER de Copa del Rey, que queda también para la posterioridad, puede reproducirse en el audio superior.