Opinión

Yo quiero un cartón

La Firma de Leonor Ramos

"Yo quiero un cartón", la Firma de Leonor Ramos

Palencia

Imagino que esta situación que viví hace unos días y que enseguida les paso a narrar, se habrá repetido en casi todas las casas de Palencia, y digo en ‘casi todas’ porque recordemos que no todos tenemos la misma suerte. Sábado 6 de enero, sobre las 10 horas, comienzan las caras de sorpresa e ilusión de los más pequeños en mi casa y yo detrás con una bolsa de basura recogiendo el papel de regalo, que pasa de envolver un bonito regalo, con su bonito lazo y puede que con un caramelo pegado, a un revoltijo de papel que en su momento fue seguro, un bonito rollo de papel de regalo. Mitad de la bolsa llena y la otra mitad para las mil doscientas cajas, es una exageración, de cartón de cada coche, juguete, pieza o muñeca. Cartones, cartones y cartones, en este momento me viene a la cabeza La Cartones… ¿se acuerdan de ella?

Bajo a tirar la basura para deshacerme de esa pila de papel y de cartón que ocupa mi cocina pero… vaya, contenedor lleno, hasta arriba, salen por la rendija más cartones y papel de regalo y es más, no te puedes ni acercar al contenedor azul porque tienes dos cajas de patinetes, cinco de la Nancy, dos de televisiones, diez de coches y una caja de un jamón serrano. Qué bien se han portado en algunas casas los Reyes Magos, porque esa caja de jamón no era mía.

Decido subirme de nuevo a mi casa la bolsa con papeles y cartones, no sé, me daba no sé qué seguir aumentando la montonera sabiendo además que después iba a pasar por ahí mucha gente a ver al Zunder. Pero cuál es mi sorpresa, que a las horas vuelvo a bajar y esa montaña ha crecido y mucho. A la gente le dio igual. Eso parecía el juego del tetris. Y digo yo, ¿la empresa no podría hacer un servicio especial? Vale, me diréis… hay que pagar más a trabajadores, hay que reorganizar el servicio…. mil cosas, lo sé. Entonces ¿por qué no esperamos a que se vacíe algo el contenedor? ¿por qué no cogemos el coche, total, si lo cogemos para cualquier cosa, y vemos si hay algún contenedor en otro barrio algo más vacío? No sé de verdad, yo en este caso, opté por subirlo de nuevo a casa. Pensé dejarlo para hacer una hoguera y calentar la casa, como va a subir tanto el gas…Pero al final me arriesgué. Bajé, lo tiré, y me quedé muy a gusto porque entró todo.

Así que queridos Reyes Magos, para el año que viene yo os pido o más contenedores, o más servicio de recogida, o más coherencia por parte de los vecinos. Cualquiera de las tres me vale.