Cáncer

Palencia

Hasta no hace muchos días era una palabra tabú. Hasta no hace muchos días, decir que padecías cáncer, que alguien muy cercano a ti tenía cáncer suponía una mirada de terror por parte del que te estaba escuchando, una mirada de compasión y un gesto de esos que te hacen ver que la persona no sabe qué decirte. Hasta no hace mucho la palabra cáncer era impronunciable, hasta no hace mucho el cáncer era difícil de superar, pero todo era hasta no hace mucho.

A mi alrededor esa palabra hace ya algunos años sonaba y fuerte en mi casa, en mi entorno más cercano, pero por fortuna se superó; en mi familia también sonó pero por desgracia no se superó. A mi alrededor tengo a muchas personas queridas que han perdido a un ser querido, a otros que cada día luchan contra el cáncer y lo hacen con una fortaleza envidiable. Y es que ¿quién no conoce a alguien al que la palabra cáncer resuene en sus oídos?

Hace escasos días, la Asociación Contra el Cáncer de Palencia ha inaugurado su nueva sede en Palencia, un nuevo espacio en el que poder atender, apoyar y por qué no, consolar a quien lo necesite. Me encantó ver a tantas caras conocidas en esa inauguración, y cuando digo caras, digo representantes institucionales, porque eso significa que están concienciados sobre esta enfermedad y que son conocedores de la importancia que tiene el seguir buscando la mejorara en la calidad de vida de los enfermos o de la investigación contra el cáncer.

Creo que el respaldo institucional siempre es importante, pero no sólo en plan apoyo físico sino un apoyo en todos los sentidos. Es decir, cuando hay una inauguración, como en este caso de la nueva sede del cáncer es importante que estén, pero luego cuando se cierre la puerta, ese apoyo ha de continuar en los despachos. Recuerden por ejemplo el servicio de radioterapia en Palencia. Dicen que en estos próximos años contaremos con ese servicio aquí. Esperemos que esa promesa no quede en el cajón de su mesa de despacho.

El cáncer ha ganado la batalla de muchas personas, otras ha ganado la vida, y ahora, en este momento, hay muchas personas que están luchando por ganar la batalla. Para todos los que perdieron esa batalla y para todos los que continúan luchando gracias por vuestra lección de vida.