Vox amenaza con expulsar a su concejal condenado por agredir e insultar a un hombre con discapacidad

Palencia

El Pleno del Ayuntamiento de Palencia ha aprobado la moción de IU-Podemos dirigida a reprobar a Ricardo Carrancio, concejal de Vox, tras ser condenado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Palencia al pago de una multa de 450 euros como autor de un delito de maltrato de obra por llamar "puto cojo" y golpear a la altura del pecho con la mano a un hombre que tiene una discapacidad con el voto nominal favorable de los concejales del PSOE y del grupo proponente y con la abstención del resto incluidos los compañeros de partido del afectado. Carrancio ya ha confirmado que no va a entregar su acta de concejal "por ética moral, por su educación y porque, aunque asume la sentencia insiste en que no cometió los hechos". Un debate que ha puesto de manifiesto la profunda escisión que existe en el grupo municipal de Vox al solicitar su portavoz, Sonia Lalanda, no sólo que entregue su acta sino que "abandone el grupo para evitar la indignidad de ser expulsado del mismo".

La moción para reprobar al concejal de Vox, Ricardo Carrancio, ha dejado momentos de tensión sobre todo entre la portavoz del grupo y el afectado con acusaciones mutuas de utilización de este asunto, de deslealtad y de falta de empatía. Tras la presentación de la moción los portavoces del resto de grupos políticos han esperado a que el propio Carrancio diera explicaciones para intervenir. En su alocución, el afectado ha comenzado por decir "Si bien acato la sentencia rechazo tajantemente su fallo. No he proferido expresiones difamatorias contra nadie y menos contra una persona discapacitada, jamás estuvieron en mente ni en mi boca." Asegurando en todo momento que "siempre ha trabajado por los derechos de las personas con discapacidad y recordando que la sentencia no es firme. Ha insistido en que no va a entregar su acta, que no está afiliado a Vox y que seguirá defendiendo los intereses de los palentinos tanto en el Ayuntamiento como en la Diputación.

Ha sido la portavoz de su propio partido, Sonia Lalanda, la que le ha contestado con mayor dureza asegurando que "no hay nada que justifique su conducta" lamentando, además, la soberbia con la que ha actuado en todo el asunto, sin un ápice de humildad y sin ser capaz de rectificar su conducta. Le ha recordado que la decisión de ser concejal es voluntaria y personal y le ha recordado que, no pueden permitirse "el lujo de actuaciones así". le ha exigido que abandone no sólo el acta de concejal sino también el grupo municipal de Vox para evitar ser expulsado del mismo, amenaza que, de momento, queda en el aire.

El resto de los partidos ha coincidido en señalar que la decisión de dejar su acta es única personal y, todos han criticado los hechos, completamente inaceptables para cualquier persona pero más execrables todavía cuando se está hablando de una persona que es representantes de los palentinos. Todos han recordado que cualquier tipo de violencia es inadmisible y han coincido con la portavoz de Vox en que la actitud de Carrancio, una vez conocida la sentencia, no ha sido nada ejemplar.