Carnaval, Carnaval... Carnaval no quiero...
La Firma de Guillermo Flores
Carnaval, Carnaval... Carnaval no quiero...
Palencia
Si hace unos días se pasaban las Candelas con más pena que gloria (y que conste que el mercado que se prepara en la Plaza Mayor me gusta mucho), ahora terminamos de pasar un carnaval que yo personalmente he visto más triste que nunca y en caída libre.
Dicen que cualquier tiempo pasado fue mejor y en este caso no tengo la más mínima duda porque a parte del desfile de carnaval que hace varios años se llevó del martes al sábado y que anima la calle Mayor a su paso y el Salón a su fin, el resto de sitios y días discurrieron como un fin de semana más.
Hubo un tiempo en que muchos nos disfrazábamos para salir y pasarlo mejor y, además carnaval funcionaba de viernes a martes. Todo este tipo de fiestas han ido decayendo y concentrándose en días y en lugares concretos con más raíces. Ahora todos se van a Canarias, Cádiz, Venecia o Rio de Janeiro, es broma. Pero sí que algunos optaron por otras opciones más animadas como Aguilar de Campoo y algún otro pueblo de la provincia, incluso una buena fiesta que organizó un municipio del alfoz como es Villamuriel, dejando nuestro carnaval un tanto desolado.
Yo he ido algún año a Ourense y la participación es allí tan fuerte que si no vas disfrazado eres el raro. Se mantiene la ilusión de niños y padres por el disfraz en el colegio, pero a los adultos apenas se nos ve a unos pocos disfrazados en los bares. Bares que hace tan sólo 6 o 7 años también se disfrazaban, no sin esfuerzo, ayudando a generar ese ambiente necesario. Existía un concurso de disfraces de bares en el que participaban al menos una docena, entre ellos 3 locales míos. Por recordar alguna edición, un año un bar le pusimos de Venecia con sus máscaras, puentes y góndolas, otro de Polo Norte, blanco por completo con pingüinos y osos polares incluidos y el tercero de surrealismo Daliniano, con mesas y personas colgando de los techos. Un trabajo de más de una semana y algo de dinero para llamar la atención de los clientes en esos 3 o 4 días que duraba el carnaval.
Hoy no hacemos nada, ni siquiera uno de los fijos tantas veces ganador de estos concursos como era el bar Adrián se decora o el clásico concurso de Playback del Universonoro que concentraba el ambiente carnavalero de lunes y martes tampoco se ha hecho este año. Hasta a los camareros cuesta disfrazarles. Está claro que nada es para siempre.
¿Y cuáles han sido los motivos de esta desmotivación carnavalera por parte de la hostelería? Elijan entre uno de estos 3 supuestos:
1. Los hosteleros están forrados y ya no necesitan hacer nada.
2. Los hosteleros están desmotivados, el esfuerzo y la inversión no compensa al haberse quedado esta fiesta en un solo día.
3. Nos hacemos mayores en Palencia y ya no pensamos tanto en la fiesta y mucho menos en la noche. 4. La culpa es de Pedro Sánchez y Mañueco. Esta batalla del carnaval la hemos perdido, otras ganaremos, espero…
A por lo siguiente, Semana Santa. Amén Jesús