Los regantes del Canal Macías Picavea suspenden la campaña de riego
No pueden asumir, aseguran, una nueva campaña sin la garantía de agua por la rotura constante de la tubería principal
Valladolid
La Junta de Gobierno de la Comunidad de Regantes del Canal Macías Picavea ha decidido suspender la campaña de riego de este año, ante la imposibilidad de garantizar la llegada de agua por la rotura constante de la tubería principal. La decisión supone un duro golpe para los más de 600 agricultores de los municipios de Rioseco, Villabrágima, Tordehumos y Villagarcía de Campos, que han realizado importantes inversiones en infraestructuras de riego y maquinaria y tendrán que conformarse con cultivos de secano en las cerca de 2.500 hectáreas que riega este canal.
Según el presidente de la Comunidad de Regantes, Jesús Carro, es imposible seguir asumiendo el coste de las reparaciones. Las compañías de seguro se han dado de baja, pero los agricultores tendrán que seguir pagando la cuota correspondiente de modernización de este regadío. Por ello se pide una solución a Seiasa, que es la empresa del ministerio de Agricultura encargada de esta obra hace veinte años. "Aunque se iniciaran las obras de reparación de esa tubería de veinte kilómetros, se tardaría un año" asegura Carro y eso es inviable con la producción esta campaña. "Esto es un duro golpe para una zona donde se han quedado en el campo muchos jóvenes y si no se pone remedio pronto, en dos años se marcharán" asegura.
Veinte años de antigüedad
Se trata de una comunidad modernizada hace casi 20 años, en base a los proyectos impulsados por la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa) y el Itacyl, y que según el presidente de la Comunidad, Jesús Carro, “no se acometió conforme al pliego de condiciones del proyecto, que recogía que tenía que tener canto rodado, hasta un metro por encima, y allí no hay canto rodado ni arena por ninguna parte”, tal y como constatan los informes periciales.
La Comunidad abarca 2.410 hectáreas de regadío con cerca de 600 comuneros propietarios, de los que la mitad son regantes, y “cuyo sustento se pone ahora en riesgo”. El coste total de la modernización fue de casi 20 millones de euros, de los cuales más de 13,5 millones son pagados por la propia comunidad en anualidades durante 50 años. “Va a ser el primer año, en los 65 años de historia de la Comunidad, que nos vamos a quedar sin regar”, lamentó. Al ser uno de los primeros canales modernizados, denunció, “no se acertó ni en la elección del tubo ni en la ejecución e instalación del mismo”.
En las últimas campañas “se ha producido un elevadísimo número de averías y roturas en la tubería general cuya propiedad corresponde a Seiasa”. En la campaña pasada hasta una veintena de reventones, lo que ha levado a esta comunidad de regantes a “una situación insostenible”, a lo que se suman el lucro cesante y las indemnizaciones abonadas por la aseguradora. “Estas averías ocasionan unos enormes costes económicos, de forma que la Comunidad no puede hacer frente ni al mantenimiento de la tubería, ni a los daños que pueda ocasionar”, aseguran los regantes.
El regadío de la comarca “ha contribuido al relevo generacional y el asentamiento de población en los pueblos”. “Pedimos, por favor, que no lo destruyan y que den prioridad a la solución de este problema”.
José Manuel Gozalo
Redactor de Radio Valladolid. Licenciado en Ciencias...