Riqueza y pobreza en Castilla y León

Palencia

Hace pocos días leíamos en un titular de prensa que «Ser rico en Castilla y León “tiene premio”». Luego, el periodista nos explica que gracias al sistema fiscal de nuestra Comunidad aquellos contribuyentes que ganen más de 160.000 euros al año serán los segundos de España que menos tributos paguen después de Madrid. Perfil, contribuyente soltero, menor de 65 años y sin hijos.

A quien se vea en esa situación, digo la de tener unos ingresos de más de160.000 euros al año, les tiene que sonar a música celestial, qué suerte, dirán, ser castellanos y/o leoneses y vivir en un cuasiparaíso fiscal sin salir de casita, que fuera hace mucho frío y se pueden complicar las cosas si alguien tira de la manta, como ya le ocurrió a una conocida familia palentina que se fue a hacer turismo de maletín a la Islas Caimán y luego salió en todos los papeles, aunque al final con la generosa amnistía fiscal de Rajoy salió ganando con creces.

Lo dicho, un premio. No llamaría tanto la atención si en el extremo contrario del espectro económico de las familias no hubiera un 22´1 por ciento de la población en riesgo de exclusión, sí he dicho 22 por ciento, casi una cuarta parte de los habitantes de Castilla y León. Más de medio millón de personas (525.248) de los dos escasos millones y medio que somos en total (2.383.703) están en la pobreza. El 7 por ciento en pobreza extrema. ¿Cómo se mide? Pues, contando las dificultades para poder comer carne, pollo o pescado cada dos días, no llegar a fin de mes, no disponer para imprevistos, no mantener la vivienda a una temperatura habitable, etc. El perfil mayoritario es de mujer joven del ámbito rural y con menores a cargo.

Y no nos da vergüenza. Y salen los gobernantes de la Junta y se jactan de lo bien que lo hacen, pero no salen a explicarnos el pelotazo de los 20 millones de euros de la Perla Negra, y otros tantos que saldrán de la trama de las eólicas cuando llegue el juicio.

Menos mal que el malvado gobierno de “Perro” Sánchez se ocupa de subir las pensiones y dotar más ayudas, si no esta situación no se sostendría. A tal punto salva el gobierno central a esta Comunidad que en el reparto del fondo territorial hemos recibido 1.760 millones de euros más que los que aportamos a la hucha común del Estado. No es extraño, si nuestros ricos no pagan seguiremos yendo de pobres para que nos financien otros.