Un hombre fuera de toda sospecha

Palencia

Con el inesperado fallecimiento de David Nieto se han hecho numerosas semblanzas sobre su figura como empresario y cargo deportivo. Es el tributo al personaje público jalonado de merecido compromiso y decencia en un ámbito, el del deporte, y más si cabe el del fútbol, donde tras las emociones que genera se esconden pillos y transgresores de la honestidad.

Pero antes del personaje está la persona, que si digno fue en su quehacer deportivo más significativo fue su desempeño como ser humano: el David Nieto que deja familia, amigos, vecinos y admiradores. El hombre que contaba con identidad propia en las relaciones personales, con su carácter conversador y conciliador, con la amabilidad y el respeto a los demás por bandera.

En la vida puede haber recambio para los personajes, pero para las personas nunca. David Nieto, descansa en paz.