Futuro incierto del bibliobús escolar

El bibliobús escolar afronta el último trimestre del curso, y lo hace sin que esté garantizada la continuidad del servicio más allá del verano, por la jubilación de Fernando Martos y Dita de la Iglesia. Ellos ponen fin a 40 años llevando la lectura hasta el último confín de la provincia con programas de animación implementados desde el Centro Coordinador de bibliotecas en colaboración con colegios e institutos.

El servicio ha ido perdiendo fuelle en los últimos años. De 4 bibliobuses, 3 están fuera de circulación y las plazas que han ido quedando vacantes por jubilación se han amortizado. Este lunes en Hoy por Hoy, Fernando Martos defendía la continuidad de un servicio que ha animado a leer a 45.000 alumnos en más de 36.000 encuentros con niños y adolescentes de todos los puntos de la provincia: “Vamos a dejar escrito por si alguien lo quiere considerar y para que quede constancia, cual es el planteamiento que hacíamos en las aulas, el que ha tenido éxito y porque merece la pena mantener todo esto, pero no vemos que haya relevo”.

El único bibliobús nacional especializado en literatura infantil y juvenil en una iniciativa que nació en Zamora y que ha merecido, entre otros muchos reconocimientos, el del Gremio de Editores de España.