Luces de Catedral
Cientos de personas rodearon la Catedral de Burgos para contemplar la nueva iluminación
Burgos
El 23 de marzo, a la hora señalada, 21:30, se encendían, por tramos, las nuevas luminarias de la Catedral de Burgos. Del cimborrio al Condestable, del Sarmental a las agujas, las torres, pináculos, cubiertas, portadas, hasta completar todo el conjunto catedralicio, en una renovación lumínica que no se producía en los últimos 40 años.
Cientos de personas rodearon el templo, en la Plaza del Rey San Fernando, en la plaza de Santa María, en las escalinatas a este y oeste, llenando la calle Fernán González, para guardar en sus teléfonos móviles miles de instantáneas, como testimonio del acontecimiento.
No hubo presentación al público, tan solo unas palabras a los medios de comunicación, por parte de la alcaldesa Ayala, el presidente del Cabildo, Félix Castro y del Obispo Iceta, antes de que se apagaran las luces del entorno, menos las de San Nicolas, por cierto, y de forma inminente aparecieron los distintos espacios de la Catedral, uno tras otro, con una luz nueva, más brillante y luminosa que permitía apreciar detalles que antes permanecían en penumbra.
Una exclamación admirativa se escuchó entre las gentes congregadas, cada vez que se iluminaba una de las partes para concluir con un aplauso. A continuación, el Orfeón Burgalés puso voz a la luz desde la base de la fachada real de Santa María.
La nueva Iluminación servirá para realzar la Catedral de Burgos y además de ser más eficiente desde el punto de vista energético, cumpliendo los estándares de eficiencia y de ahorro de consumo, presenta como novedad la posibilidad de alumbrar el monumento en distintas partes, “que van a estar iluminadas de forma independiente cuando sea necesario, por fases, y permitirán una visión nocturna en 3D. La iluminación está formada por 300 luces Led, 780 proyectores regulables repartidos por la fachada y la cubierta, con una potencia contratada de 25,5 kW.
La inauguración coincidió con la celebración del Día del Planeta, en el que, durante una hora, y como iniciativa de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), las luces de los distintos edificios públicos de la ciudad se apagaron. La inversión municipal ha sido de 834.000 euros “con fondos propios y tal y como comprometió el anterior equipo de Gobierno”.