La lluvia y el viento marcan el paso en Semana Santa

Se cumplen los pronósticos que desde hacía días inducían a pensar que esta podría ser la peor Semana Santa en años, si hablamos de las condiciones meteorológicas. Varios días seguidos de frio, lluvias, fuertes vientos e incluso nieve han condicionado la celebración de la semana más importante del año en Zamora. En el momento de escribir estas líneas se han suspendido las procesiones de Jesús del Vía Crucis, el Silencio, la Virgen de la Esperanza y la Vera Cruz y en adelante muy probablemente ocurra lo mismo con alguna otra cofradía porque la previsión del tiempo sigue siendo complicada durante varios días más.

Aunque la semana comenzó con tiempo estable y temperaturas suaves que permitieron la celebración con normalidad de los primeros desfiles procesionales, ya el lunes por la tarde llegó el primer avance de la borrasca con viento y descenso de temperaturas. Fue el Martes Santo cuando el termómetro cayó en picado y la lluvia hizo acto de presencia obligando a suspender la procesión del Vía Crucis. El miércoles las condiciones se complicaron con la llegada de fuertes vientos que provocaron algunas incidencias durante la jornada y a última hora de una tarde de viento y lluvia y después de esperar todo lo posible, la Real Hermandad del Cristo de las Injurias se vió obligada a quedarse en la Catedral donde se llevó a cabo un sencillo acto tras acordarse la suspensión de la procesión; esa noche una ventana de tiempo sin precipitaciones permitió a la Hermandad de Penitencia salir a la calle aunque por precaución se decidió hacer el recorrido corto por el barrio de Olivares.

Confirmando las peores previsiones el tiempo se ha complicado el Jueves Santo, suspendiéndose las procesiones de la Virgen de la Esperanza, aunque se pudo cantar la Salve en la Plaza de la Catedral, y la Santa Vera Cruz y lo que esté por venir ya que los pronósticos siguen anunciando lluvias hasta bien entrada la próxima semana.